La consejera de Sanidad, Brígida Mendoza, advirtió hoy de que "aquí ni un solo paciente se ha quedado sin ser atendido" pese al déficit de financiación por parte del Estado, que cifró en 2.142 millones de euros, mientras que para PP y grupo Mixto la sanidad canaria está en la UVI.

Brígida Mendoza señaló en el pleno del Parlamento canario, en el que compareció a petición del grupo Mixto para explicar qué medidas se han adoptado frente al deterioro de los servicios públicos sanitarios, que "no ha faltado ni un tratamiento a ningún paciente por caro que sea".

Mendoza afirmó que no se ha podido avanzar a la velocidad que le hubiera gustado porque las vicisitudes no han facilitado este ritmo, a lo que se suma la exigencia de "acotarnos" a unos recortes que han tenido repercusión en las listas de espera y que han obligado a adoptar decisiones "difíciles y duras de poner en marcha".

"Sin la financiación adecuada es muy difícil evitar el deterioro sanitario y por ello he reclamado al Gobierno de España que corrija el déficit", reiteró la consejera, quien acusó al PP de dar "una marcha atrás de años" en la sanidad pública, de volver "casi a la beneficencia".

Mientras, en Canarias se ha legislado para dar respuesta a las personas que se han quedado sin tarjeta sanitaria "aunque muchas se niegan", afirmó Mendoza, quien enumeró las actuaciones llevadas a cabo para dar estabilidad al mayor número posible de trabajadores sanitarios y aumentar el rendimiento quirúrgico mañana y tarde.

No se han cerrado servicios de urgencias ni plantas hospitalarias "sino más bien al contrario", pese a estar condicionados por una situación financiera desfavorable, continuó la consejera, quien insistió en que se ha hecho una gestión "lo más eficiente posible pese a los recortes generalizados".

Anunció también que ya se ha remitido al Parlamento autonómico el III Plan de Salud de Canarias y subrayó que la situación financiera ha condicionado el ritmo en la implantación de servicios sanitarios.

Román Rodríguez, portavoz del grupo Mixto por Nueva Canarias, sostuvo que la sanidad pública española y canaria están en crisis y en las islas es el segundo motivo de preocupación, tras el paro, para el 64 por ciento de los ciudadanos entrevistados en la encuesta sobre los sondeos petrolíferos.

"Hemos tenido el mejor sistema sanitario del mundo, con prestaciones gratuitas y de alta calidad y a menor coste que otras sociedades, pero esto se ha quebrado y está en una severa crisis, ya que los recortes y copagos han herido de muerte al sistema sanitario español", advirtió Rodríguez.

El parlamentario llamó a tomar conciencia de que se debe recuperar capacidad fiscal para destinar esta cantidad al servicio sanitario público "si queremos recuperar lo que habíamos conquistado".

La diputada del grupo Popular María Teresa Pulido opinó que la sanidad canaria "está en la UVI con pronóstico reservado, y los síntomas que la aquejan son muy graves".

A su juicio, "es para preocuparse" del deterioro sufrido en los últimos tres años, que atribuyó a CC "con la inestimable ayuda del PSC", pues ambos han conseguido "multiplicar por cuatro" las listas de espera "y esto no son cifras, sino más de 46.000 canarios que no saben cuándo van a ser operados o los va a ver un especialista".

El diputado del grupo Socialista Jesús Morera consideró que no se ha mermado la calidad "de lo que se hace" y aseguró que es cierto que hay mayor tiempo de espera para pruebas diagnósticas y operaciones, pero "la ecografía que se hace es la gran calidad y la técnica quirúrgica es de garantía".

"El servicio sanitario está peor pero no porque se hagan peor las cosas, sino por la obvia relación con la financiación de la Comunidad Autónoma", concluyó Morera.

En ello coincidió José Luis Perestelo, del grupo Nacionalista Canario, quien aludió al déficit de financiación por parte del Estado y pidió "un esfuerzo de rigor a la hora de hablar de prestación de servicios", pues que Canarias cuente con trece millones de turistas es "una buena noticia" pero también afecta a una sanidad "que el Estado no compensa adecuadamente".

Perestelo elogió asimismo a la consejera de Sanidad porque, dijo, a pesar de contar con 500 millones menos "ha mantenido los puestos de trabajo".

Román Rodríguez dijo que los grupos de gobierno tratan de hacer creer que todos los problemas de la sanidad son de financiación, y para el PP se trata de organización y gestión, mientras que para el diputado de Nueva Canarias es todo ello pero además falta "estrategia, visión de futuro y reorganización de los servicios".

La falta de recursos ha hecho un daño irreparable al sistema sanitario, con miles de trabajadores menos que hace seis años, los equipamientos han envejecido y todo ello implica, a juicio de Rodríguez, que "negar el impacto de los recortes es negar la evidencia".

En su opinión, está "el caldo de cultivo hecho para la privatización", para que "la gente se busque la vida en función de sus posibilidades" económicas.