El proyecto de Reglamento que regula las viviendas de uso turístico en la Comunidad autónoma de Canarias "puede poner en peligro la calidad de los distintos servicios turísticos así como crear un sistema de competencia desleal entre el alquiler vacacional y la actividad de los hoteles y apartamentos establecidos y legalizados que desincentiva el cumplimiento de la exigencia reglamentaria", asegura la patronal tinerfeña (CEOE-Tenerife) en una nota.
El citado reglamento, añade el comunicado, "no normaliza ni establece criterios mínimos de calidad ni segmentos acordes a la imagen turística que Canarias tiene en el exterior".
Muchas de las viviendas que integran la oferta de alquiler vacacional son viviendas de autoconstrucción, carecen de cédula de habitabilidad e incluso de licencia de primera ocupación, añade.
La regulación de esta actividad, explica la organización, "no debe tener como fin último dar carta de naturaleza a la actividad de alquiler vacacional, sino aflorar la economía sumergida y desregulada de muchas de estas viviendas que ayudan a sostener el incremento de la presión fiscal de las empresas y familias que cumplen con sus deberes fiscales".
Asimismo, indica CEOE-Tenerife, " nos preocupa el estricto control normativo del sector de alojamiento turístico" -tanto hotelero como extrahotelero- y esta propuesta de regulación es "a todas luces laxa e insuficiente".
"También echamos en falta un estudio en profundidad de los efectos perniciosos que puede generar en nuestro sector insignia tanto en PIB como en empleo, por la entrada en el mercado de un importante número de camas turísticas así como el efecto llamada que podría suponer sobre el parque de viviendas vacías".
A la patronal le "llama poderosamente la atención" que con este tipo de regulación se mantenga la existencia de una moratoria turística "que ahoga la iniciativa empresarial, siendo una de las partes más importantes del entramado burocrático y legal que soportan las empresas en el Archipiélago".
"Nos gustaría también que se estudiara la posibilidad de que la regulación de este tipo de viviendas se realice fuera del ámbito turístico tradicional, así como que dichas viviendas solo puedan ser cedidas a un único usuario turístico y no se permita el uso compartido de la misma ni la cesión o subcontratación de toda o parte de dicha vivienda a terceros", añade.
Dado que el objetivo de la norma "debe ser aflorar la economía sumergida y la transparencia e identificación de esas viviendas turísticas", y para facilitar la inspección, plantea que se identifique la vivienda con una placa y a la entrada del edificio donde esté.
Proponen un inventario
La patronal propone la realización de un inventario "permanentemente actualizado" que operará a modo de control para el cumplimiento del equipamiento mínimo obligatorio por parte de las administraciones públicas con responsabilidad en materia de inspección. "Entendemos que se debe informar al ayuntamiento de cada localidad donde se ubique la vivienda de la concesión del distintivo de vivienda vacacional para garantizar el cobro de los impuestos municipales, así como la obligatoriedad de publicar los precios".