Si decimos Tejiade muchos no sabrán de qué se trata, pero si explicamos que es el nombre de un caserío de La Gomera se sabrá mucho más en lo que a la historia de Canarias se refiere. Pero lo que no se comprende y hasta es de extrañar en pleno siglo XXI es que Tejiade lleve toda su existencia sin luz eléctrica y sea el único lugar de la Isla que no tiene el citado servicio.

Ni las denuncias vecinales, ni el proyecto que lleva abierto desde los años 80, ni la afirmación del alcalde de San Sebastián, Ángel Luis Castilla, de que "es hora de terminar con décadas de batallas administrativas" han podido hacer realidad el sueño de que la luz se haga realidad en Tejiade.

Aunque sus palabras estén llenas de buenas intenciones, los vecinos tampoco creen en lo dicho en abril del pasado año por el presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo: "Manifiesto mi compromiso y el de la corporación que presido para participar en la financiación de las obras, teniendo en cuenta que se trata de una actuación complicada. Comprendemos que la electrificación de este caserío supone una inversión considerable para las arcas municipales. Pido al alcalde de San Sebastián, Ángel Luis Castilla, que me remita el proyecto, con el fin de poder comenzar a trabajar en el mismo a la mayor brevedad posible. Debemos ser conscientes de que el acometimiento de esta actuación redundará en beneficio de todos. Tomamos esta decisión después de haber comprobado que ninguna institución asume el coste de 300.000 euros que supone la obra".

Lo último sobre este proyecto es la reunión del alcalde, Ángel Luis Castilla, con la consejera de Empleo, Industria y Comercio, Francisca Luengo, "quien se ha comprometido formalmente a financiar, si fuera posible este año y si no con cargo a los presupuestos del próximo ejercicio, este proyecto vital para dicho barrio, que permitirá un desarrollo sostenible que mejore la calidad de vida de sus habitantes", señaló el alcalde.

Tejiade está ubicado en la parte sur del municipio, cerca de la carretera de acceso al núcleo de playa de Santiago, y su principal actividad económica es la ganadería. Por tanto, la electrificación va a suponer una mejora importante en la calidad de vida de los ciudadanos que allí residen y un mejor rendimiento de las instalaciones agropecuarias, ya que se facilitarán tareas como la automatización de las ganaderías y los cultivos.

En su día, las palabras del presidente de la asociación de vecinos de Tejiade, Pedro Cabrera, fueron muy contundentes al afirmar que "llevamos más de veinte años reclamando luz y agua, pero el Ayuntamiento y el Cabildo se pasan la pelota y siempre estamos igual. No podemos vivir en el caserío porque no tenemos nada. Además, para rehabilitar las casas te piden tantos papeles como para edificar una nueva, por lo que muchas de ellas se están cayendo. Los vecinos de Tejiade han recogido 4.000 firmas de apoyo en La Gomera y en Tenerife, y han mantenido infinidad de reuniones con responsables municipales e insulares".

En Tejiade se colocaron farolas para el alumbrado público, pero ante la carencia de suministro eléctrico sólo las encienden durante las fiestas gracias a un generador.

Si nos remontamos al siglo XVIII, ya se nombra el caserío y se sabe algo de su arquitectura y su ganadería, ya que María de la Concepción Alsola, mujer que fue de Juan Rodríguez Casanova, declaró que compraron en Tejiade a su hermano José Casanova unas tierras y fabricaron una casa de piedra vana cubierta de tejas y adquirieron una suerte de tierras grandes con siete colmenas, treinta cabras, un caballo ensillado, una burraca, una yegua de silla, tres reses vacunas y un novillo, según testamento de 1782.

El caserío de Tejiade no renuncia a que un día la luz ilumine el interior de unas casas que llevan toda la vida a oscuras.