El presidente del Cabildo de La Gomera, Casimiro Curbelo, anunció ayer que se presentará como candidato a la corporación insular por la Agrupación Socialista Gomera (ASG), fuerza que también concurrirá al Parlamento de Canarias y a los ayuntamientos de la Isla.

Curbelo, arropado por militantes y simpatizantes de la fuerza política, dijo que este partido se crea tras "la traición de Ferraz", en relación a la sede de la dirección nacional del PSOE, y matizó que la decisión de dejar la militancia del partido en el que ha estado 33 años no ha sido fácil pero era lo que necesitaba la Isla.

"Lo hago por los gomeros, que nos necesitan, y por las formas, que no han permitido el diálogo, la sinceridad, la tolerancia y la lealtad", señaló Curbelo, quien aseguró que se trata de un proyecto meditado y consecuente con el futuro de La Gomera.

"Me voy con desencanto y por traición", dijo Curbelo, quien aseguró que no quiere ningún tipo de revanchismo "pensando en los gomeros y deseando lo mejor para todos".

Manifestó que en el grupo socialista en el Cabildo de La Gomera no hay fisuras y no habrá moción de censura y consideró que "no se atreverán a erosionar" la labor que se desarrolla en la corporación insular.

Adelantó que si el PSOE presenta al alcalde de San Sebastián, Ángel Luis Castilla, como candidato al ayuntamiento, la Agrupación Socialista Gomera presentará una candidatura formada por personas jóvenes.

Curbelo mostró su solidaridad con la candidata del PSOE a la presidencia del Gobierno de Canarias, Patricia Hernández, y señaló que él no es diferente a los presidentes del Cabildo de La Palma, Anselmo Pestana, o al de El Hierro, Alpidio Armas.

Sí es diferente, dijo, al secretario de Organización del PSOE, Julio Cruz, "y no quiero ser igual" a él, reiteró Curbelo, al tiempo que atribuyó a Cruz y al secretario general, José Miguel Pérez, "el peor resultado del PSOE en las islas".

Apuntó que su nuevo partido tiene 135 militantes y "cientos y cientos de simpatizantes" y aseveró que tiene ilusión y ganas para llevar a cabo el cambio y la transición en el Cabildo insular.

Curbelo afirmó que no ha sido fácil soportar la presión, que la traición a la que se ha visto sometido no ha sido individual "sino al pueblo gomero" y que su nuevo proyecto tiene el apoyo de la mayoría social.

Resaltó que quiere que La Gomera sea un referente para el Archipiélago y manifestó que quiere ganar las elecciones del 24 de mayo y trabajar para que la isla de La Gomera sea tolerante y "con mucho futuro".

Curbelo advirtió de que al no ser ya militante del PSOE no estará condicionado para criticar las decisiones que adopte el Gobierno de Canarias, aunque manifestó que será coherente y reivindicativo "desde el respeto". "Seré exigente con los gobiernos de Canarias y central para que no haya canarios de primera y de segunda", añadió.

Curbelo dijo que "decenas y decenas" de militantes del PSOE le han llamado para pedir consejo sobre qué hacer.

Desencanto

"Me voy del PSOE por desencanto a causa de la traición y porque la ambición de algunos no ha sabido esperar", señaló Curbelo, quien matizó que será el pueblo gomero el que tendrá su última palabra en las urnas. Curbelo rechazó los motivos argumentados por el PSOE para descartar su candidatura, considerando injusto que no se le dé el derecho a la presunción de inocencia y opinó que lo que querían era que desapareciera de la escena política. El presidente insular, que detalló los objetivos del nuevo partido, consideró que es urgente y necesario poner fin a tanto "dislate y zancadillas" para referenciar al ciudadano, que debe ser el objetivo. "El poder no está en los partidos sino en la calle y voy a seguir en el socialismo", concluyó.