La recién creada Viceconsejería de Política Social del Gobierno de Canarias -de la que dependen cuestiones como la dependencia o la protección de los menores- permanecerá vacante hasta que se produzca el cambio de ejecutivo, tras las elecciones del 25 mayo.

Así lo ha decidido el Gobierno -no sin recibir múltiples presiones desde el seno de Coalición Canaria- después de haber forzado el cese del recién nombrado viceconsejero, José Gilberto Moreno, que se formalizó ayer en el Boletín Oficial de Canarias (BOC).

Moreno permanecerá como diputado en el Parlamento de Canarias y sus funciones al frente de Política Social las asumirá, en buena medida, el secretario técnico de la Consejería, al que ya se le ha delegado la capacidad de firmar todo tipo de documentos, aunque el grueso de las decisiones las tomará la consejera, Inés Rojas, que, entre otras cuestiones deberá resolver esta misma semana el conflicto que mantiene con los siete cabildos a cuenta de la aplicación (o no) de un nuevo modelo de copago a las personas con discapacidad beneficiarias de la ley de dependencia.

Ayer se formalizó la dimisión de Gilberto Moreno, un mes después de haber sido nombrado

Desde el inicio de esta legislatura y hasta el pasado 23 de febrero, José Gilberto Moreno ocupó el puesto de director general de Dependencia, Menor y la Familia, pero su entrada en el Parlamento de Canarias -propiciada por la salida de María del Mar Julios como senadora- obligó al Gobierno a crear la figura de la Viceconsejería para evitar incompatibilidades.

Sin embargo, en el seno de Coalición Canaria se vio con recelo que una sola persona (y de Gran Canaria) ocupara tantos puestos y obligó a Moreno a dimitir con el objetivo de dar ese puesto a dirigentes nacionalistas de otra isla; sin embargo, finalmente quedará vacío.