Meri Pita, secretaria general de Podemos en Canarias, estuvo el pasado martes en Tenerife presentando la confluencia con Sí se Puede (SsP). Además de analizar sin demasiados rodeos el presente de la formación, se muestra confiada de las posibilidades electorales de este partido de reciente creación.

¿Cómo está la situación interna de Podemos?

Somos todavía una formación joven y estamos en período de afinación de la herramienta organizativa. Además, venimos de una cultura de entender la política como unas cuotas de poder, corrientes... Tenemos que desaprender e ir aprendiendo esas nuevas formas. No es fácil; lleva un coste. Pero en eso estamos.

¿Qué opina de los desencuentros que se han producido en la formación, especialmente en el caso de Tenerife?

Es por esa cultura. El círculo nace en Podemos como una herramienta para acercarnos a la ciudadanía. Sin embargo, se ha entendido por parte de algunos hombres y mujeres que están en Podemos que el círculo se establece como un elemento de poder territorial, y no es así.

¿Hay quienes han visto en esta formación una vía rápida para entrar en política?

Somos conscientes de que mucha gente se acerca y ha estado intentando utilizar el trampolín de Podemos para gestionarse sus carreras particulares. Pero hay elementos y protocolos, y una Comisión de Garantías que va a poner freno a eso.

¿Qué le aporta a Podemos la confluencia con Sí se Puede?

Sí se Puede es una de las organizaciones hermanas, como otras tantas. Son ciudadanos que llevan años luchando desde la horizontalidad, desde la asamblea... Aporta su experiencia en la gestión pública, cuadros políticos y suma en ese objetivo final del cambio social en el Archipiélago.

¿Qué opinión le merecen las voces que dicen que SsP ha intentado invadir Podemos?

Pues ninguna, porque en Podemos nadie invade. Tenemos unas herramientas de participación muy certeras. Los ciudadanos van a decidir si son ellos o no deben ser ellos los que nos representen.

Hablando de las primarias (la entrevista se realiza la pasada semana), si Fernando Ríos consigue ganar en ellas, ¿qué pasará?

Tengo el convencimiento de que no va a llegar a las primarias. Es un caso muy claro de arribismo político. Confío en que los organismos internos de Podemos actúen en consecuencia y no permitan ni a este señor ni a algunos más que se puedan acercar en ese sentido a utilizar Podemos como un empoderamiento personal.

¿Pero esa decisión no estaría yendo contra la filosofía de un partido donde es la gente la que lo decide todo?

Es la gente la que ha puesto esa Comisión de Garantías y la gente es la que ha decidido ese protocolo de garantías. No es un ente que venga impuesto; la componen hombres y mujeres que han sido votados para eso y tienen un protocolo que ha sido decidido para ese fin.

¿Cómo le ha ido este primer mes que lleva como secretaria general?

No he parado. En Podemos todo va deprisa. Ha sido un mes delirante pero muy ilusionante. Yo estoy entregada por completo a la causa de Podemos porque creo que es una oportunidad como nunca ha tenido la ciudadanía para empoderarse y acabar sobre todo con estos niveles de corrupción política.

¿Con qué posibilidades se ven para las próximas elecciones?

Ya se nos da grupo parlamentario, y eso es importante. Como siempre, nosotros decimos que salimos a ganar.

¿Cuál es la postura de ustedes sobre pactos tras las elecciones?

Nosotros queremos gobernar y con un programa que sea nuestro. Si ese programa para gobernar necesita pactar con alguien, eso lo acabarán decidiendo en referéndum los ciudadanos.

Soluciones internas

Meri Pita considera que la "receta" contra los problemas internos -que reconoce que se han podido producir en la formación- es "la llamada al sentido común, entendiendo común como comunidad". También se refiere a la importancia de que toda la organización trabaje conjuntamente: "Tenemos una responsabilidad histórica porque la ciudadanía, por primera vez, nos coloca en posiciones de gobierno para cambiar las cosas. A través de ese sentido común espero que muchos compañeros asuman ese reto histórico y dejen las cuestiones personales o personalistas, así como esa mala formación que tenemos todos de lo que era la política del siglo XX".

La secretaria general de la formación en el Archipiélago sostiene que los miembros de Podemos deben sentir "que participan en un proyecto, pero que participan comúnmente". Según detalla, eso supone que todos deben estar en la misma "línea participativa y de empuje" para el objetivo final, "que es un cambio profundo de la sociedad, romper una serie de esquemas y un proceso constituyente que nos dé otra realidad distinta de la durísima situación que en estos momentos vivimos".