La modificación de la Ley de Renovación y Modernización Turística de Canarias pasó la semana pasada el debate de primera lectura en el Parlamento regional y será aprobada, previsiblemente, en el próximo pleno, pero al Gobierno le asombra que sigan arreciendo las críticas mientras se ultima la tramitación del cambio normativo que propuso el Gobierno a raíz de la polémica valoración de su primer año de vigencia -la oposición la tilda de arbitraria-. "Sinceramente, no lo entiendo", expresa el viceconsejero regional de Turismo, Ricardo Fernández de la Puente. "Lo que pedían los empresarios era que no se construyera más de lo mismo, sino con más calidad y con independencia del criterio del número de estrellas, y es lo que ha hecho el Gobierno de Canarias: buscar parámetros que permiten construir establecimientos de cualquier categoría".

"Critican que sin reglamento -que regulará los requisitos a cumplir para construir los nuevos establecimientos- no se puede hacer nada, y ahora que saldrá esta solución intermedia para que puedan hacerlo sin esperar el año que durará la tramitación del reglamento, vuelven a criticar", razona. "Critican que, hasta entonces, habrá una interpretación por parte del Ejecutivo del cumplimiento de esos parámetros, pero es que se hará con criterios que ya están en la ley, como la eficiencia energética o la calidad, no se inventará nada nuevo", promete.

"No entiendo las críticas: hemos pasado de permitir solo los nuevos hoteles de cinco estrellas y los de cinco estrellas gran lujo -que por otra parte era lo que pedían los empresarios en Gran Canaria al principio- a que bastara con que fueran solo los de cinco estrellas, y fue a última hora que el Cabildo de Gran Canaria se sacó de la manga lo de los hoteles de cuatro estrellas, más por una crítica política que de otro tipo", asevera.

En todo caso, aclara que "hoy por hoy no se puede hablar de una moratoria porque no hay límite al crecimiento: se puede construir establecimientos de cualquier categoría solo cumpliendo con los requisitos".

También en el ámbito normativo se defiende de las críticas vertidas por la Asociación Canaria del Alquiler Vacacional (Ascav), que arremetió contra su gestión al confirmar que el inminente decreto que regulará la materia dejó fuera la figura del "bed and breakfast". En réplica a sus palabras, señaló que "no estoy aquí para hacer los caprichos de uno, sino para intentar consensuar toda las sensibilidades que hay en el turismo".

Recuerda que la Ascav solicitó varios cambios al texto que sí se asumieron, pero en este asunto "se les dijo que no desde el principio" porque "hay una posición por parte de otras administraciones y asociaciones empresariales que no ven el alquiler vacacional en viviendas de uso particular", aparte de dificultades para realizar las necesarias inspecciones a los establecimientos al ser viviendas particulares habitadas, y que ninguna comunidad ha regulado el asunto porque la legislación nacional difiere de los países nórdicos, donde es más habitual esta fórmula.

El viceconsejero espera que el texto vaya al Consejo de Gobierno esta semana -o la próxima a más tardar- y que quede aprobado "a la brevedad".

"Sí hay menos empleos, y menos pymes"

La batalla entre las patronales hoteleras y los sindicatos a causa del empleo y el crecimiento de la actividad en los últimos años adquirió otra dimensión cuando el propio presidente regional, Paulino Rivero, pidió a los empresarios en un pleno parlamentario que contrataran más.

Haciendo suyas las críticas de los representantes de los trabajadores -que también respaldan Nueva Canarias y, más importante aún, el socio socialista del Gobierno, Rivero demandó mayor solidaridad de los hoteleros dada la buena marcha de la actividad, que en los últimos cuatro años rompió el récord en llegada de visitantes extranjeros.

Los sindicatos -así como el PSOE y NC- aseguran que de 2008 -antes de la crisis- a hoy existen 40.000 empleos menos, pese a que el último año la cifra de turistas superó los 12 millones. Los hoteleros, por su parte, afirman que ya han contratado todo el personal que necesitan y que no puede ser más. ¿Quién miente en esta historia?

"Caemos en el error de pensar que el turismo es solo el alojamiento, pero es mucho más". Comienza por matizar el viceconsejero. "Es cierto, de 2008 a 2014 se perdieron 40.000 empleos, ¿pero cuántas empresas pequeñas cayeron por el camino?", pregunta antes de recordar que la crisis tuvo un menor impacto en el turismo que en otras actividades asociadas, como el comercio.

Apunta que el convenio de hostelería contempla que un 60% de los trabajadores sea fijo -el resto, según la ocupación-, lo que explica que aunque el crecimiento de la actividad fue del 8% en 2014, el empleo creció el 4%. "Para generar más trabajo son necesarias más pymes: el turismo es más que los hoteles".

La promoción es "barata"

Ante la crítica de UGT Canarias al mantenimiento de una partida pública para la promoción turística -al entender que el resto de las actividades no cuentan con un respaldo de este tipo y que el turismo no ha sido solidario en la creación de empleo pese a la buena racha por la que atraviesa-, Fernández de la Puente remarca que se trata de la actividad que supone el 30% del PIB, el 30% del empleo canario y que recauda unos 1.700 millones de euros anuales. "No beneficia a un sector, sino al conjunto de la economía", defiende. "Y solo es un gasto de 16 millones, que ayuda a mantener un flujo de cerca de 13 millones de turistas al año", por lo que entiende que el ratio de la promoción "es muy bajo para lo que genera".

En materia de ferias, el viceconsejero critica que "alquien" -en alusión al Cabildo de Gran Canaria con ocasión de Fitur- haya pensado que "por tener unos metros más de mostrador y una foto más le va a ir mejor". Defiende que el Gobierno intentó buscar "más lo que nos une que lo que nos separa para sumar porque estas peleas tienen un recorrido muy corto". Cree que esta forma de actuar responde más "a una clave política que una técnica o profesional".

Una viceconsejería

Acerca de si el próximo Gobierno regional debería repetir la fórmula de una viceconsejería de Turismo, Fernández de la Puente se muestra "muy satisfecho" de que su área haya dependido en esta ocasión de Presidencia porque así recibe un impulso adicional ya que de esta manera se aprovecha mejor de la transversalidad de las políticas diseñadas por el Ejecutivo. "La experiencia ha sido positiva, pero lo que haga el próximo Gobierno dependerá de lo que consideren mejor quienes lo integren", señala en tono conciliador. En todo caso, matiza, si el presidente regional es también el máximo responsable del área y marca las grandes líneas de trabajo, el turismo recibe la "máxima visibilidad".

"No es lo mismo que el jefe sea el presidente o un consejero" porque el mandatario "es el capitán de todo el equipo", lo que ha supuesto una ventaja de este modelo, que ha funcionado "bien". En todo caso, aboga por que en unos años se verifique si hace falta una consejería exclusiva, una dirección, otra viceconsejería o cualquier otra fórmula. "Del turismo vive mucha gente, es importante escuchar y ver cómo se puede mejorar", más aún cuando los recursos son escasos, aunque en esta legislatura se hizo "bastante" con los fondos disponibles.