Las declaraciones del nuevo consejero de Sanidad, Jesús Morera, que ha propuesto realizar pruebas diagnósticas en las tardes y fines de semana han, como poco, sorprendido a los profesionales, aunque también ha generado unas expectativas cuyo cumplimiento dependerá del margen financiero, aún incierto, del que disponga el Gobierno regional.

La sorpresa obedece, primero, al poco tiempo transcurrido desde que el socialista tomó posesión de su cargo, y, segundo, porque no se ha explicado cómo se van a poner en marcha estas medidas: con qué financiación, personal, dotaciones materiales...

Levy Cabrera, secretario general del Sindicato Profesional de Médicos de Tenerife, valoró ayer "el ímpetu y las ganas" que desprenden las declaraciones del consejero, pero consideró también que "hay que planificar actuando en todos los aspectos".

Cabrera explicó que el problema no es solo la accesibilidad al sistema, sino que si diagnosticas más debes "tener más camas y más quirófanos". "Todo irá en función de qué se va a invertir", advirtió. En este sentido, afirmó que poner un marcha un plan que de verdad mejore sustancialmente el sistema sanitario hacen falta "muchos millones".

En resumen, el secretario general del Sindicato de Médicos de Tenerife cree que el plan no es viable "sin aumentar los recursos". En caso contrario, "el sistema se colapsa en una semana porque no tenemos dónde ingresar".

Por su parte, Rodrigo Martín, presidente del Consejo Autónomo del Colegio de Médicos de Canarias, calificó de "precipitadas" las declaraciones de Jesús Morera.

Martín se mostró "confuso" sobre el hecho de que el consejero hubiera adelantado que "iba a cambiar las maneras y a contar con los profesionales" y, sin hablar con los médicos, ya hubiera hecho esa declaración de intenciones. "Solo se reunió con los sindicatos y habló de generalidades", recordó el presidente de la organización colegial, antes de calificar de "como mínimo imprudente" la propuesta.

Según Martín, el consejero debería haberse sentado antes con los profesionales y ver los recursos de los que se dispone, que son muy diferentes en Tenerife y Gran Canaria. "En el Negrín tienen exceso de espacio y camas y nosotros no. En Tenerife solo hay dos centros especializados de Urgencias", detalló.

Asimismo, afeó que el consejero hubiera dado a entender que los médicos no trabajaran lo suficiente y dijo que tal afirmación carecía de un diagnóstico sobre la posible mala gestión. "Durante estos años de crisis hemos trabajado más para mantener el servicio", afirmó.

Desde el Sindicato de Enfermería Satse, Leopoldo Cejas celebró que Morera se haga eco de "una de las viejas reivindicaciones" de su organización, que cree que los hospitales deben estar a pleno rendimiento al menos doce horas al día. En cuanto a las pruebas en fines de semana, tampoco representan "ningún problema" para Satse. "El objetivo del sistema sanitario público no son las infraestructuras, sino los usuarios", sentenció.

Respecto a la viabilidad de que la medida se materialice, ve inevitable cierto escepticismo vinculado a las dificultades que supone, aunque no por ello deja de reconocer sus "expectativas" y su "ilusión". "El consejero tiene que intentar que otras áreas del Gobierno apuesten también por un modelo económico que favorezca la sanidad pública", señaló.

Intersindical Canaria mantiene una postura similar, la de que hay que "optimizar" el funcionamiento de los hospitales. "No tiene sentido que los quirófanos y el aparataje para pruebas estén operativos en un horario prácticamente funcionarial", sostuvo Catalina Darias, portavoz del sindicato en el HUC.

Eso sí, Darias advirtió de que "para que la medida funcione, tiene que ir acompañada de la adecuada partida presupuestaria". Aunque respeta los "cien días de gracia" para el nuevo consejero de Sanidad, adelantó que si su propuesta resulta ser "propaganda", Intersindical criticará a Morera "duramente".