Los desprendimientos provocados por las intensas lluvias que han caído hoy sobre Gran Canaria han obligado al Cabildo a cerrar al tráfico tres carreteras, según ha informado la corporación insular.

La primera de ella es la carretera de Agaete a La Aldea (GC-200), afectada por un desprendimiento en el kilómetro 20, en la zona conocida como la Degollada de la Yegua.

En ese punto, un importante volumen de tierra y rocas ha caído sobre la vía y ha arrastrado incluso parte de las mallas de protección, indica la corporación en un comunicado.

Desde esta semana, debido al riesgo de desprendimientos, esa carretera solo estaba abierta al tráfico para turismos, autobuses de menos de nueve metros y camiones, pero no podían circular por ella peatones, ciclistas, motos ni guaguas grandes.

Además, la carretera GC-60 de Tejeda a Tunte también ha sido cerrada desde el kilómetro 19 a la circulación por desprendimientos.

En la GC-500, próxima a la zona del Lago Taurito, la circulación ha tenido que ser interrumpida por caída de rocas de grandes dimensiones, que han dejado inutilizado el carril sentido sur.

El personal del Cabildo de Gran Canaria y otros equipos de seguridad y emergencias están en esos lugares a la espera de poder actuar en las vías cortadas.

En el caso de la carretera de La Aldea, el Cabildo ya adelanta que es preciso esperar a que cesen los desprendimientos y se desconoce en qué momento pueda volver a ser abierta al tráfico.