La falda que llevas es demasiado corta, ¿no? Te veo cansada, mejor no salgas con tus amigas. Oye, deja de coquetear con tus compañeros de clase. Que sea la última vez que estás conectada al Whatsapp a las diez y no me contestas. La violencia de género tiene muchas formas de manifestarse, algunas físicas y otras psicológicas, y además, a pesar de los avances en derechos, afecta a jóvenes y mayores. De hecho, los miembros de los colegios profesionales de psicólogos y trabajadores sociales de Tenerife comparten la percepción de que hay un auge de conductas controladoras en los centros escolares y que es imprescindible desarrollar más campañas de concienciación para evitar que esa semilla brote entre los más moldeables.

Demelza Fortes, vocal de Género e Igualdad del Colegio Oficial de Psicólogos, considera que uno de los problemas más importantes es que muchos chicos no perciben las actitudes de control como una forma de violencia. "Los estudios demuestran que una de las formas más frecuentes es el control y las redes sociales la favorecen. Nos hemos acostumbrado a saber dónde están los demás y con quién en cada momento".

No hay investigaciones específicas a nivel local sobre la incidencia de la violencia de género entre los jóvenes, pero las visitas a centros han dado la señal de alarma. "Cuando hemos ido a dar talleres a institutos nos hemos encontrado con chicos y chicas que tenían por primera vez una relación amorosa. Muchas de esas chicas se sorprendían mucho cuando íbamos detallando qué comportamientos no debían tolerar porque son síntomas de que algo no iba bien. A medida que lo explicábamos se les cambiaba la cara", cuenta Fortes.

Estas sensaciones han llevado al Colegio de Psicólogos a poner en marcha un ambicioso proyecto de prevención de violencia de género en centros educativos. A la organización le gustaría cubrir la franja de edad que va de los 11 a los 18 años y para ello ofrece el servicio a coste cero. Según los datos de la última macroencuesta desarrollada en toda España, que hacen referencia al año 2012, la incidencia de "la violencia de control" entre las mujeres jóvenes que tienen o han tenido pareja en alguna ocasión es muy superior a la media de mujeres de cualquier edad.

Iris Gómez, presidenta del Colegio Oficial de Trabajadores Sociales, está de acuerdo con las conclusiones que saca Fortes. "El tema de la violencia entre adolescentes no es tan llamativo porque el desenlace no es el peor de los posibles", denuncia. Sin embargo, "nos encontramos con jóvenes de 13, 14 o 15 años que son maltratadores psicológicos". La prevención es "la clave" porque muchos de ellos ni siquiera se dan cuenta de lo que están haciendo.

Todos estos comportamientos no tienen por qué derivar en casos de violencia física de género, pero puede ocurrir. Para Gómez es fundamental la concienciación y aumentar las campañas de información, pero también formar a las familias. "En las escuelas de padres cada vez se demandan más cuestiones sobre cuándo debo darle a mi hijo un teléfono, pero también sobre conductas violentas. Deben aprender a detectarlas para orientar a sus hijos. No debemos olvidar que en estas edades están moldeando su personalidad".

Demelza Fortes también está convencida de que el momento de transformar las creencias erróneas es ese, cuando aún no se han aferrado demasiado a ellas. A medida que el tiempo avanza es más complicado cambiar determinadas actitudes. "La reinserción del maltratador adulto es prácticamente imposible porque parten de la idea de que ellos están por encima de la mujer, y así no se puede avanzar".

A pesar del efecto de la crisis en la violencia de género -menos recursos y más miedo a denunciar- los datos muestran algo de esperanza: aumenta el porcentaje de mujeres que han logrado salir de la violencia de género.

Docentes de Secundaria

La Unidad de Igualdad de la Universidad de La Laguna (ULL) también está muy concienciada con la necesidad de erradicar conductas violentas entre los adolescentes. Por ese motivo, desarrollará durante octubre y noviembre diferentes acciones de formación y de sensibilización frente a las violencias de género en entornos educativos, en el marco del Plan de Igualdad ULL 14-17. El primero de ello es el programa "Prevención de Violencias Machistas en Adolescentes y Jóvenes" para el alumnado del Máster en Formación al Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas de la institución.

Universitarios

Además, la institución académica ofrecerá también un curso semipresencial para profesorado de la ULL: "Prevención de Violencias Machistas en Adolescentes y Jóvenes". Está dirigido al profesorado Universitario del Master en Formación al Profesorado, al del Grado de Magisterio y al de los Institutos de Educación Secundaria de Tenerife.