La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) firmará su primer convenio con el Gobierno canario y cederá cincuenta pisos para atender las necesidades de familias en riesgo de exclusión social.

Este acuerdo piloto, que será rubricado en las próximas semanas, se suma a los que ya ha firmado la entidad con varias comunidades autónomas, a las que ha entregado alrededor de 2.000 pisos en el marco del plan de cesión de vivienda social iniciado hace dos años. En el caso de las Islas, este será el primer acuerdo entre ambas partes y, según avanzaron fuentes de la Consejería de Vivienda, el primero de muchos más acuerdos.

La Consejería de Políticas Sociales, Empleo y Vivienda utilizará este modelo de convenio para alcanzar más acuerdos con otras entidades bancarias, ampliar el parque de viviendas sociales e intentar garantizar el derecho a la vivienda de miles de personas que, desde que empezó la crisis, se han visto incapaces de afrontar el pago de sus hipotecas.

Entre las viviendas que la Sareb entregará a la Comunidad Autónoma se encuentran viviendas vacías y ocupadas. En el caso de estas últimas, se trata de familias con una orden de desahucio inminente. Vivienda convertirá las hipotecas en alquileres sociales y decidirá la cuantía de cada familia en función de la renta media.

Además de estos dos acuerdos, la Consejería también estudia dotarse de más casas públicas a partir de pisos de promotores privados.

La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria tiene previsto duplicar la bolsa de viviendas destinadas a fines sociales y llegar hasta las 4.000 unidades. En total se podría beneficiar a unas 14.000 personas en toda España.

Así lo anunció ayer el presidente de la sociedad, Jaime Echegoyen, durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Senado recogida por la agencia Europa Press, donde aseguró que desde el inicio de su actividad, la Sareb "se mostró sensible" a los problemas de acceso a la vivienda que se han vivido en España como consecuencia de la crisis.

"Son programas que están teniendo un impacto real, aunque modesto, en la vida de muchas familias que luchan por acceder a una vivienda digna", apuntó antes de añadir que cerca de 5.000 personas ya han encontrado cobijo en una vivienda gracias a estos programas.

El llamado "banco malo" acordó en 2013 poner en marcha un programa de cesión de vivienda en régimen de alquiler asequible a las comunidades autónomas con una bolsa inicial de 2.000 viviendas.

Desde que entonces, la Sareb ha firmado acuerdos con Cataluña, Aragón, Galicia, País Vasco, Baleares, Canas y Castilla y León, estas dos últimas autonomías pendientes de firma. Echegoyen adelantó que la sociedad también mantiene conversaciones avanzadas con Castilla-La Mancha, Comunidad Valenciana, Cantabria y Comunidad de Madrid, además de con Andalucía, Asturias, Extremadura y Canarias.