El presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, pedirá al Gobierno la declaración de zona catastrófica debido a los "cuantiosos" daños que el temporal de lluvias está causando en la Isla para poder acogerse a las ayudas previstas para estas situaciones.

La corporación insular explicó ayer que los daños de los últimos días han sido "enormes" en infraestructuras propiedad de la Institución, como los valorados este viernes en el seno del Consejo Insular de Aguas, donde se dio cuenta de destrozos en instalaciones de depuración y desalación que superan los 800.000 euros.

Además, añadió que las torrenciales lluvias caídas en Gran Canaria, especialmente en Telde, han provocado "numerosos destrozos" en las infraestructuras viarias, desplomes de muros, socavones y corrimientos de tierra, además de viviendas inundadas, sótanos y garajes anegados e incluso vehículos arrastrados casi hasta el mar.

Telde intentaba ayer volver a la normalidad tras registrar unas 300 incidencias debido a las lluvias torrenciales, que ocasionaron 15 cortes de electricidad, 18 derrumbes y 15 accidentes de tráfico.

Tras una cierta tregua, los fuertes chubascos reaparecieron durante las primeras horas de la tarde de ayer dejando algunos incidentes en las islas de la provincia de Las Palmas, informó el Centro Coordinador de Emergencias y Seguridad (Cecoes) 112.

En Gran Canaria, las principales zonas afectadas fueron Ingenio, Santa Lucía de Tirajana y Telde. Mientras, en Lanzarote, las llamadas por incidencias relacionadas con la lluvia provenían principalmente de Haría, y en Fuerteventura hay más incidencia en las localidades de Antigua, La Oliva y Puerto del Rosario.