La Consejería de Educación de Canarias ha asegurado hoy que está en contacto con la Administración del Estado para implementar un método que permita a todos los empleados que trabajan con menores aportar un certificado de que nunca ha sido condenados por delitos de índole sexual.

A partir de la reforma de la Ley Orgánica de Protección del Menor, todo aquel que desempeñe una profesión o oficio que implique un contacto habitual con menores debe acreditar que no ha sido condenado en firme por delitos de agresión o abuso sexual, acoso sexual, exhibicionismo, prostitución o corrupción de menores, ni tampoco por trata de seres humanos.

Para ello, añade la ley, deberá aportar una certificación negativa del Registro Central de delincuentes sexuales.

La Consejería canaria de Educación dice que trabaja en este campo siguiendo las instrucciones del Estado.

"Se mantienen los contactos para encontrar la mejor manera de proceder para facilitar a todo el personal la obtención de la certificación necesaria, cuando hablamos de más de 25.000 profesionales de todas las categorías", explica.

Para ello, añade, se está gestionando con el Ministerio de Justicia que se pueda obtener el certificado por vía telemática.