Políticas Sociales incrementará en 22 personas los efectivos personales y destinará casi 10 millones de euros a "hacer frente a los atrasos y dar un empuje al número de altas en el sistema de dependencia". "Más recursos y más personal son las claves del plan de choque que nuestra Consejería pone en marcha. El objetivo no es solo cumplir con la Ley de Dependencia, sino dar de alta este año a 600 dependientes y a otras 3.000 personas durante 2016", anunció ayer en comisión parlamentaria la vicepresidenta y consejera de Empleo, Políticas Sociales y Vivienda del Gobierno de Canarias, Patricia Hernández. "Tener pocos recursos humanos y mal enfocados es lo que ha generado una mala gestión", subrayó.

En este sentido, aclaró que, de "enero a junio de 2015, se incorporaron al sistema de Dependencia 464 dependientes, mientras que de julio al 30 de octubre se han incorporado 932 personas a los que hay que sumar las 600 nuevas altas que prevemos incorporar. Es decir, hemos triplicado en tan solo unos meses el número de altas en el sistema de atención".

Según explicó Hernández, "estamos trabajando para la incorporación de personal suficiente para estudiar, valorar y resolver las solicitudes pendientes. Son necesarios equipos de personal, médicos, psicólogos, asistentes sociales y auxiliares administrativos en número suficiente para abordar el proceso de evaluación y concesión de los planes integrales de evaluación (PIA)".

A nivel de recursos humanos, aclaró que el plan se concreta en la contratación de personal, con carácter temporal, para la creación de dos equipos de trabajo: uno en Las Palmas de Gran Canaria, y otro en Santa Cruz de Tenerife, dedicados exclusivamente a resolver la bolsa de solicitudes de personas que ya están valoradas y esperan la resolución del PIA.

La propuesta de personal se concreta así en unas 22 profesionales, 11 en cada provincia, para la realización de las funciones de grabación en el aplicativo informático, como elaborar resoluciones, cálculos económicos y emisión de dictámenes.

En relación a la financiación, Hernández subrayó la necesidad de dotar con un mayor presupuesto al área de Dependencia, "que pueda dar respuesta al actual número de beneficiarios, al tiempo que se atienden también las nuevas altas".

"El Gobierno pone en marcha este plan de choque con el objetivo fundamental de dar respuesta y atender al mayor número posible de solicitudes y para gestionar el reconocimiento de la situación de dependiente. Es decir, ofrecer un servicio o prestación con el que se pueda afrontar esta situación y que traiga como consecuencia directa una mejora en la calidad de vida de estas personas. Es evidente que es un objetivo prioritario de nuestra política en este ámbito", enfatizó la vicepresidenta y consejera.