"Optimismo cauteloso". Así describe Antonio Ortegón, portavoz del comité de huelga del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), el estado de ánimo de los trabajadores después de la reunión que mantuvieron ayer con el consejero de Economía e Industria del Gobierno regional, Pedro Ortega, de cuyo departamento depende la empresa pública. Las garantías de Ortega de que no se producirán despidos "inminentes" ha llevado al comité a anunciar la "suspensión temporal" de los paros diarios que realizan desde el 13 de enero.

Suspendida -que no desconvocada- la huelga y disipado el temor a los despidos, la gerencia del centro y la plantilla negociarán "sin amenazas", celebró Ortegón, quien se mostró esperanzado en alcanzar un acuerdo antes del 15 de marzo, fecha límite que ambas partes han fijado. El consejero manifestó un optimismo aun mayor y confió en que las conversaciones culminen con éxito incluso antes de esa fecha. "La distancia entre las posiciones es corta", constató.

Aunque los despidos han sido el principal motivo que ha llevado a los sindicatos a la convocatoria de huelga, Ortega desmintió que su departamento haya tenido intención de llevarlos a cabo. "Nunca hemos planteado un ERE, no sé dónde lo han oído", respondió al ser preguntado por los planes de recorte de plantilla que, según el comité de empresa, se habían anunciado como la fórmula para rebajar el déficit de la empresa.

El consejero de Economía expuso su disposición a estudiar algunas de las alternativas planteadas por el personal del Instituto para incrementar su capacidad de captar ingresos y reducir el déficit previsto para el cierre de 2016, que la dirección del centro estima en unos 800.000 euros y que los trabajadores no creen tan elevado. Entre estas opciones está la de que el ITC se encargue del control e inspección de las máquinas recreativas, una actividad que, a juicio de la plantilla, aportaría alrededor de 300.000 euros anuales. Participar en actividades de formación para el empleo es otra de las propuestas del comité para mejorar las finanzas de la empresa.

Asimismo, Ortega se comprometió a tratar de revertir el recorte de 150.000 euros que, a través de una enmienda parlamentaria, ha sufrido el Instituto Tecnológico de Canarias respecto a su presupuesto inicial para este año.

El comité de huelga ya ha recibido de la gerencia documentación financiera, aunque considera que aún es necesario contar con más información. La convicción de los trabajadores es que el déficit al cierre del ejercicio no será de la magnitud que calcula la dirección. "Sabemos que algún esfuerzo tendremos que hacer, pero si el déficit no es tan elevado ese esfuerzo será ciertamente distinto", advirtió Antonio Ortegón.

Según el presidente del comité de huelga, ambas partes están "en la vía de alcanzar un acuerdo". No obstante, recordó que es importante dotar de estabilidad "a medio y largo plazo" tanto al empleo en el ITC como a la actividad de I+D+i que desarrolla.

Sueldos recortados, pero no tanto

La propuesta de la dirección del ITC para sufragar el déficit previsto para 2016 consiste en prolongar durante dos años el recorte salarial que los trabajadores soportan desde 2014, aunque con una mejora progresiva de las retribuciones hasta recuperar el sueldo original en 2018. La disminución de los salarios -que alcanzó el 14% durante los dos últimos años- sería del 11% en 2016 y volvería a suavizarse en 2017. La propuesta incluye una cláusula de revisión para recuperar los salarios si se captaran proyectos e ingresos adicionales. A comienzos de 2014, la plantilla y la dirección de la empresa pública llegaron a un acuerdo de rebaja retributiva a cambio de que no se materializara el expediente de regulación de empleo (ERE) anunciado por la Administración. Dicho acuerdo venció el pasado 31 de diciembre, por lo que mientras no se firme otro los sueldos que se pagan en el centro son los iniciales.