El pleno del Ayuntamiento de Telde (Gran Canaria) ha rechazado hoy declarar a José Manuel Soria persona non grata en la ciudad donde se crió, en una moción que solo contó con el apoyo de los dos ediles de Podemos que la promovían y que fue tachada por el Partido Popular de "intento de linchamiento"

El debate de esta iniciativa llevó a varios de los grupos políticos de esta Corporación, gobernada por Nueva Canarias y el PSOE, a cuestionar la trayectoria política de Soria, pero sin prestar en ningún caso su voto favorable a esa reprobación formal.

La moción únicamente contó, de hecho, con los votos favorables de los ediles que la propusieron, Esther González y Guillermo Eugenio, en tanto que los tres del PP se manifestaron en contra y el resto de los concejales se abstuvieron (NC, PSOE, Unidos por Gran Canaria, MásxTelde, Coalición Canaria y Ciudadanos de Centro Democrático).

No faltaron entre ellos, en todo caso, quienes han declarado compartir el parecer de los promotores de la moción respecto al exministro, a quien Esther González acusó de provocar un "grave perjuicio a la imagen de la ciudad", de mostrar un "desprecio reiterado a la opinión de la ciudadanía" y de ser "protagonista de una serie de decisiones que han generado gran contestación social".

En apoyo de la declaración de "persona non grata" de Soria en Telde, los ediles de Podemos citaban "la imposición de las prospecciones petrolíferas" en Canarias durante la pasada legislatura, "el freno a las energías renovables", las "dudas éticas" que, a su juicio, generan su comportamiento y sus "reiteradas mentiras" respecto a los "papeles de Panamá".

La posición de los ediles de Podemos fue secundada con aplausos y gritos de "fuera corrupción" por parte del público que llenaba el salón de plenos de Telde, en unos casos para expresar su rechazo al exministro y en otros, para manifestarle su apoyo.

La representante del PP, Sonsoles Martín, ha subrayado que "jamás pensó que esta moción se fuera a debatir", porque esperaba que no se permitiera su inclusión en el orden del día.

La concejal popular ha atribuido su presentación a la "fobia política" de sus promotores, a quienes ha tildado de "tránsfugas que quieren dar lecciones de moralidad y de ética política".

Sus ataques se basaron en la condición de concejales no adscritos a ningún partido de González y Eugenio, que fueron expulsados de la organización Se Puede Ganar por la que se presentaron a las elecciones locales de 2015.

La alcaldesa, Carmen Hernández, de NC, medió en esa polémica para argumentar que para considerarlos tránsfugas, los dos ediles tendrían que haber abandonado voluntariamente su formación política y no ser expulsados de ella y, además, haberlo hecho con el propósito de promover una moción de censura o respaldar la conformación de una nueva mayoría de gobierno en el Ayuntamiento, circunstancias estas que no se han dado.

La alcaldesa también ha defendido, frente al parecer del PP, la legitimidad de la presentación de la iniciativa sobre Soria, de la que su partido, NC, ha reconocía que "compartía todo el espíritu", pese a no respaldarla con sus votos.

La portavoz de NC, Celeste López, ha sostenido que la moción de Podemos era "una oportunidad para que quede claro que hay actitudes en política que no deben seguir quedando impunes", si bien ha pedido cambiar la propuesta de declarar persona non grata al exministro por la de mostrar repulsa por su proceder.

Como los promotores de la moción no aceptaron el cambio que les sugería, NC se abstuvo en la votación.

Desde Coalición Canaria, Gloria Cabrera ha justificado su abstención aduciendo que su organización apuesta por "una nueva forma de hacer política donde no se persiga a nada ni a nadie", mientras que, desde Más x Telde, Álvaro Monzón dijo no querer "crucificar a nadie" pese a aclarar que, a su juicio, Soria cometió "muchas tropelías".

El PSOE también optó por abstenerse, aunque sus ediles no intervinieron en el debate.