El juez Salvador Alba y el empresario Miguel Ángel Ramírez hablaron sobre las repercusión que la declaración que este iba a efectuar días después tendría para la querella del exministro José Manuel Soria contra la jueza Victoria Rosell, que en ese momento estaba pendiente de admitir el Supremo. Así lo ponen de manifiesto las transcripciones de la grabación completa de la conversación, según publicaron ayer los diarios Canarias 7 y La Provincia, conversación que ha recuperado la Guardia Civil de la grabadora que usó Ramírez para registrarla, en la que supuestamente Alba le orientó sobre lo que tenía que declarar para perjudicar a Rosell, ya diputada nacional de Podemos, a cambio de beneficios procesales para él.

Esa grabación se realizó en marzo, cuando Salvador Alba estaba al frente de la instrucción de la causa penal por fraude fiscal contra Miguel Ángel Ramírez, presidente de Seguridad Integral Canaria y la UD Las Palmas, que había tramitado con anterioridad la jueza Victoria Rosell. De acuerdo con los dos diarios, en un pasaje de esas grabaciones Ramírez y Alba hablan de la relación del primero con Soria, que acababa de querellarse contra Rosell ante el Supremo para acusarla de retrasar a propósito esa causa penal guiada, presuntamente, por intereses personales (las relaciones comerciales de su pareja con Ramírez).

"Soy un tío que va con Soria a muerte", le comenta el empresario Ramírez al magistrado

"Yo soy un tío que va con Soria a muerte", dice Ramírez en uno de los fragmentos que no aparecía en el archivo de audio que él mismo entregó a los juzgados de Las Palmas después de que Alba dejara el caso para regresar a la Audiencia, de los que se omitieron varios pasajes con al menos 14 cortes.

A raíz de esos episodios, el TSJC tiene abiertas dos causas penales contra Rosell y Alba, respectivamente.