Casi el 60% de la oferta de alquiler vacacional de Canarias está localiza en los principales destinos turísticos de las Islas. Los "microdestinos" -pequeñas unidades geográficas muy dependientes del turismo- de Tenerife son los que concentran un mayor número de viviendas y plazas, aunque es Gran Canaria -con prácticamente la mitad de camas- la que registra los precios más elevados. Solo en dos zonas el alquiler turístico predomina sobre el hotelero y extrahotelero: El Cotillo (Fuerteventura) y El Médano (Tenerife).

Estos datos proceden del trabajo sobre el análisis territorial de la vivienda vacacional en las áreas turísticas del litoral canario que cuatro expertos universitarios -entre ellos Moisés Simancas, profesor de la Universidad de La Laguna- han presentado recientemente en el XV Coloquio de Geografía del Turismo, el Ocio y la Recreación de la Asociación de Geógrafos Españoles, celebrado en Palma de Mallorca. Recurriendo a las ofertas incluidas en la plataforma Airbnb, los autores del estudio concluyen que el precio medio de estos alojamientos ronda los 66 euros en Canarias y que, tras Gran Canaria, con 92 euros por noche, se sitúan Lanzarote, con 89, y Tenerife, con 72. Por debajo de la media están Fuerteventura (62 euros por noche), La Palma (43) y La Gomera (41).

Los especialistas constatan que, pese a la prohibición de esta oferta en las zonas turísticas del Archipiélago -a la espera de lo que establezca la revisión del decreto que así lo determina-, su presencia en estas áreas sigue creciendo e, incluso, su número se ha incrementado.

Los microdestinos tinerfeños aglutinan 2.441 viviendas vacacionales y 10.216 plazas. En los de Gran Canaria se comercializan 1.576 y 5.825, respectivamente. Les siguen Fuerteventura, Lanzarote, La Gomera y La Palma. No obstante, el microdestino individual con una mayor oferta es Corralejo, en Fuerteventura, con 435 viviendas, casi un 20% más que el siguiente, Costa Adeje, que tiene 349.

Los autores del estudio han contabilizado el número de evaluaciones de las viviendas en Airbnb para así hacerse una idea de la consolidación o fidelización de los destinos. Taurito, en Gran Canaria, es el microdestino con más evaluaciones, una media de veinte por alojamiento, casi el doble de los que se sitúan a continuación: San Agustín (también en Gran Canaria), el conjunto histórico de Puerto de la Cruz (Tenerife) y Los Cancajos (La Palma).

El estudio no encuentra una relación "significativa" entre la mayor antigüedad de la oferta reglada y el aumento de las viviendas vacacionales, y tampoco entre la calidad de la primera y el volumen de las segundas.

Un modelo que contribuye a renovar los alojamientos

Pese a la normativa que prohíbe el alquiler vacacional en las zonas turísticas, esta oferta es una realidad en las Islas, y su regulación, además, puede tener efectos positivos, según los autores del estudio. Los expertos argumentan que esta modalidad supone "una alternativa y una innovación" para unidades alojativas originalmente turísticas que han terminado convirtiéndose en residenciales, al posibilitar su renovación y su reincorporación al mercado.

Asimismo, el trabajo apunta a esta oferta como "una oportunidad que permite avanzar en la democratización del turismo", al elevar y generalizar el gasto y ampliar el número de beneficiados por esta actividad.