El equipo de gobierno del Cabildo de Gran Canaria (NC, PSOE y Podemos) ha acatado hoy la resolución judicial que le prohíbe izar en sus instalaciones la bandera tricolor con las siete estrellas verdes, a pesar de que considera de que supone "un ataque a la libertad de expresión".

El Cabildo de Gran Canaria recibió ayer por la tarde la notificación de las medidas cautelares dictadas por el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 4 de la isla contra su decisión de izar todos los 22 de octubre la bandera de las siete estrellas, que ha sido impugnada por la Delegación del Gobierno en las islas.

El presidente del Cabildo, Antonio Morales (NC), ha comparecido esta mañana a la entrada de la Casa Palacio secundado por representantes de los tres partidos de su gobierno para leer un manifiesto de defensa de las decisión del pleno de rendir homenaje a esa enseña, ligada en sus orígenes al movimiento independentista, por considerar que se trata de un "símbolo de la canariedad".

"Nos lo imponen, pero no lo compartimos", ha denunciado Morales respecto a la prohibición del acto, antes de mostrarse convencido de que conseguirán ganar este asunto en los tribunales y podrán izar la bandera de las estrellas "más adelante y todos los 22 de octubre".

El presidente del Cabildo de Gran Canaria ha criticado a la Delegación del Gobierno por impugnar este tipo de actos de homenaje a la bandera de las siete estrellas, porque entiende que supone "un ataque a la libertad de expresión y una falta de respeto a un acuerdo legítimamente aprobado" por la corporación insular.

El acto celebrado en el Cabildo de Gran Canaria ha concitado la presencia en sus exteriores de medio centenar de personas que portaban la misma bandera que la institución no ha podido enarbolar y que han gritado consignas como "ÑViva Canarias libre!" e "ÑIndependencia!".