La Asociación Canaria del Alquiler Vacacional (Ascav) denunció ayer las "zancadillas y restricciones" que, a su juicio, están sufriendo los propietarios y gestores de las viviendas turística. El colectivo recuerda en un comunicado que lleva esperando desde julio a que el Gobierno regional aclare las condiciones del decreto que regula esta actividad para poder aplicar "el mismo régimen de seguridad jurídica" y aplicar con los mismos criterios esta normativa en todo el territorio autonómico.
"Mientras tanto, los propietarios continúan a merced de los caprichos de los ayuntamientos y cabildos, que se exceden en sus competencias, con exigencias documentales, clasificación de actividad y autorizaciones solicitadas que en ningún momento responden a las marcadas por la normativa", expone Ascav.
La asociación insiste en la necesidad de una respuesta a esta solicitud y recuerda que, según la propia Consejería de Turismo, el Archipiélago recibirá este año más de 14 millones de visitantes, de los que un 22% se aloja en viviendas vacacionales.
Entre tanto, el Ejecutivo autonómico no tiene todavía el borrador de modificación del decreto de 2015 -que prohíbe el alquiler vacacional en las zonas turísticas y también la modalidad del "bed & breakfast"-, pese a que la Consejería anunció que estaría finalizado en octubre.