El Cabildo de Gran Canaria ha desactivado el Plan de Emergencias Insular (PEIN) a tenor de la predicción de la Agencia Estatal de Meteorología y la desactivación de la alerta del Gobierno canario, que dan por finalizado el episodio de lluvias y fenómenos costeros adversos en Gran Canaria.

La situación de alerta en Gran Canaria fue declarada el martes 25 de octubre por la aproximación de varias borrascas al archipiélago. No obstante las lluvias, aunque localmente intensas, no produjeron incidentes de gravedad, ni ha habido que lamentar daños personales.

Los servicios de emergencias y mantenimiento coordinados por el Cabildo de Gran Canaria han estado en todo momento pendientes para actuar, y solo fue necesario cerrar la carretera de Agaete a La Aldea por desprendimientos, tal como estaba previsto en caso de que comenzara a llover y el peligro que entrañaba la circulación, así como la 605 de Ayacata.

Se han producido algunos desprendimientos, como el ocurrido en la GC-60 de Maspalomas a Tunte, a la altura de la Degollada de la Yegua, sin que fuera necesario cerrar más vías, así como un accidente leve de un taxi en la GC-500, de Maspalomas a Mogán, a la altura de Taurito, sin heridos.

El agua caída durante estos días ha servido para empapar la tierra seca, ha regado los campos para los próximos 20 días y ha permitido recolectar 116.000 metros cúbicos de agua en las presas, lo que supone otras 4 semanas de riego.