El Fiscal Superior de Canarias, Vicente Garrido, ha dicho este miércoles que ve con "enorme tristeza" la "tormenta" que afecta a la justicia en las islas ante la investigación abierta al juez de la Audiencia de Las Palmas, Salvador Alba, por grabaciones.

En una entrevista concedida a ''Cope Canarias'' y recogida por Europa Press, ha asumido que la justicia pasa por un "mal momento" en el archipiélago porque ha pasado a ser "protagonista" de las noticias. "Nunca he tenido esa sensación en mi carrera", ha afirmado.

Garrido ha destacado que "todo es grave", tanto que los propios jueces se vean inmersos en "cuestiones controvertidas" derivadas de su actividad, como los "propios hechos" que dan lugar a acciones disciplinarias o penales.

Sobre la tardía respuesta de la justicia, ha comentado que la Fiscalía ya fijó su posición en la comisión parlamentaria de Justicia, ha habido "manifestaciones contundentes" de la Junta de Jueces de Las Palmas, y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha abierto un expediente disciplinario.

Según Garrido, "es muy importante que se mantenga la apariencia de imparcialidad ante la ciudadanía", y el caso de grabaciones de Salvador Alba está "alejado" de lo que debe imperar en una sala de justicia, que es el "debate, la paz y el sosiego".

Ha comentado también que la Fiscalía se adhirió al recurso de Alba contra la personación en la causa de la exdiputada de Podemos Victoria Rosell para ejercer la acusación particular por una cuestión "técnica", dejando abierta la puerta a que se persone en calidad de víctima.

APOYA LA ACTUACIÓN DE EVANGELINA RÍOS

Asimismo, ha respaldado la actuación de la Fiscal Delegada de Delitos Económicos de la Fiscalía Provincial de Las Palmas, Evangelina Ríos, en la investigación disciplinaria de Victoria Rosell. "La actuación dentro del procedimiento ha sido correcta, con respaldo de la Fiscalía Superior y la General del Estado", ha comentado.

Garrido ha insistido en que jueces y fiscales "trabajan de forma abnegada, sencilla y eficaz", y el ''caso Alba'' es una "situación irregular que normalmente no se produce".

No obstante, ha reconocido que la justicia tiene un "gran problema", que no goza de gran respaldo social, por lo que ha apelado a ganarse su confianza "con trabajo serio, claro y riguroso", si bien episodios como este hacen que "la valoración caiga en picado".