Como ya pasó con Granadilla y la concatenación de crisis por Sanidad o Hacienda, el Gobierno regional vuelve a estar en el precipicio, pero ni el presidente, Fernando Clavijo, quiere destituir a los 4 consejeros del PSOE para no convertirlos en víctimas, ni los socialistas pretenden abandonar el Ejecutivo, al menos de momento. El hondo cráter dejado por el reparto del Fdcan el lunes tambalea como nunca el pacto, aunque, según diversas fuentes de ambos socios, lo hace mayormente en el Gobierno y no en el resto del pacto.

De hecho, socialistas como Anselmo Pestana (presidente del Cabildo palmero), Iñaki Lavandera (portavoz parlamentario) o el diputado Manuel Marco dan por hecho que, aunque caiga el Ejecutivo, el acuerdo se mantendrá en las instituciones claves de la Isla Bonita, Fuerteventura y Lanzarote.

Hay voces en CC que discrepan de esta tesis y que, de romperse el Gobierno (para un lado o para el otro, principalmente con el PSOE fuera), creen que las rupturas se extenderán. Sin embargo, los que apuestan por lo contrario limitan esa afección a algunas administraciones de Tenerife, como el Cabildo, y poco más de un total de 29 consistorios en todas las Islas.

En el PSC, y según fuentes solventes, se cree muy difícil reconducir la situación del Gobierno por la pérdida total de confianza y, aunque tampoco descartan abandonar el Ejecutivo (por mucho que sea algo provisional), de momento prefieren esperar. Los socialistas censuran que ya se haya incumplido la adenda en lo local, respecto al Fdcan y casi con la información desde la consejería de Hacienda.

En la otra orilla, y según confirmaron ayer numerosas fuentes, Clavijo sí tiene claro que no destituirá a los consejeros del PSOE. Aunque en el pleno del martes ni habló ni casi miró a la vicepresidenta, Patricia Hernández, estas fuentes dicen que fue una situación dura, pero lógica tras un lunes que claramente mereció el calificativo de negro para el Ejecutivo porque las profundas discrepancias por el Fdcan no solo se dieron al final, con la marcha del PSC del consejo después de dos horas de discusión sobre los 160 millones, sino antes de la reunión.

En CC, aún no entienden lo del PSOE porque cedieron sobre que las partidas de Empleo dependan solo de la consejería. El PSC esgrime que el reparto, en un 75% bajo el criterio de la triple paridad electoral, ha sido claramente partidista al intentar reforzar a Clavijo y CC en ciertos municipios de Gran Canaria e islas menores, beneficiando a ayuntamientos donde gobiernan (Firgas o San Mateo) o donde hay alcaldesas en su órbita (Mogán). Los nacionalistas subrayan que estos municipios siempre han ido por libre y que el PSOE sabía desde hace tiempo los criterios.

Según varias fuentes, CC no quiere arriesgar los presupuestos y prefiere que se aprueben para abordar luego la situación. De hecho, el portavoz parlamentario, José Miguel Ruano, trazó ayer una clara línea entre el Gobierno y la actividad parlamentaria, confirmada luego con los avances entre CC y PSOE para consensuar las enmiendas a los presupuestos.

Las fuentes señalan también que CC prefiere esperar a enero y decidir entonces si lo local se deja fuera y si no hay forma de reconducir el Gobierno regional.

Fraga no quiere gobernar a cualquier precio

El presidente de la gestora del PSOE de Canarias, José Miguel Rodríguez Fraga, designado por Ferraz el pasado lunes, difundió ayer sus intenciones en los meses previos al congreso regional del partido en una rueda de prensa en Adeje, ubicación que ya fue criticada por diversos compañeros, que creen que debe trasladarse a Santa Cruz por su condición de referente regional. Sobre la crisis del Gobierno, Fraga dijo que su formación quiere seguir gestionando en las instituciones, pero "no de cualquier manera".

A su juicio, "es evidente que hay una quiebra de la confianza, no hace falta hacer una tesis doctoral", lo que califica de "grave". Aseguró que el pacto con CC es difícil, por lo que resulta necesario que la gestora aborde hoy, en su primera reunión, que tendrá lugar en la capital tinerfeña, este acuerdo con serenidad, marcando el rumbo y tomando las decisiones "que hay que tomar". "Está claro que algo hay que hacer, la situación no se puede perpetuar", dijo antes de recalcar que hay principios que son irrenunciables, como la lealtad y la confianza mutua. En este sentido, indicó que se debe analizar si resulta posible restablecer la confianza, un "elemento clave dentro del pacto" que se ha quebrado por ciertas actitudes.

En su opinión, la gestora del PSOE debe actuar rápidamente, "con cabeza y con corazón", con "contundencia donde se necesite contundencia y con flexibilidad donde se requiera flexibilidad". Según recordó, la adenda del pacto con CC, en la que los nacionalistas se comprometían a presentar una censura en el Puerto al PP y a que la alcaldesa de Arico, Elena Fumero, cediese su puesto a Olivia Delgado (PSC), ha sufrido un "flagrante incumplimiento", en alusión al rechazo unánime de los comités locales de CC a esas reversiones.

Fraga dijo que aún no ha hablado con Clavijo ni nadie de CC. Preguntado por cuándo se convocará el congreso, señaló que no pasará mucho tiempo, aunque afirmó que tampoco hay que precipitarse, mostrándose partidario de dar margen al partido para reflexionar y recolocar las cosas. A su juicio, sería muy precipitado convocar ahora el congreso, que será tras el federal, aún sin fecha en el calendario. Además, se comprometió a ser neutral en ese proceso, pese a su cercanía a Patricia Hernández.