Este lunes será un día muy importante para el pacto de gobierno en Canarias. Con la sede gubernamental de Las Palmas como escenario, primero se celebrará el primer consejo del Ejecutivo regional tras la espantada de los consejeros del PSOE del pasado lunes por el reparto del Fondo de Desarrollo de Canarias (Fdcan) y, justo después, salvo que haya alguna novedad potente en esa cita previa, se desarrollará la mesa del pacto que viene anunciando desde hace cinco días el PSC.
La reunión se celebrará en un ambiente enrarecido y con una creciente incertidumbre en el pacto que permite escuchar versiones totalmente contrapuestas entre integrantes de peso de ambas formaciones que, en algunos casos y hasta hace poco, opinaban de otra manera. Como indicó el jueves el presidente de la gestora socialista, José Miguel Rodríguez Fraga, la confianza está rota y la atmósfera es "irrespirable". Sin embargo, son más los que siguen sosteniendo que, al menos de momento y hasta aprobar, como mínimo, las cuentas de 2017, no habrá destituciones por parte del presidente, Fernando Clavijo, de los consejeros del PSOE ni estos decidirán, junto a la gestora, abandonar la gestión.
El lunes, pues, será clave para saber si el reparto del Fdcan (160 millones) rompe el Ejecutivo. También para comprobar si tienen más peso los incumplimientos locales de CC (el Puerto, Arico y Granadilla, de momento y a la espera de que le toque al PSOE revertir los suyos), si la confianza resulta imposible de restañar por la información en Hacienda y porque el PSC tiene claro que Clavijo estuvo detrás de la censura en el Sur o si, pese a todo esto y lo ocurrido antes con Sanidad o el cierre presupuestario sigue siendo insuficiente. En ese caso, vencerían las tesis de los que creen que, más allá de las apariencias y las crisis continuas y cada vez más agudas, la aritmética parlamentaria, el presupuesto, la ley del suelo, la de Servicios Sociales y el miedo a ser desbancado por el otro pueden mucho más.
Según varias fuentes, ni siquiera se descarta que este lunes se decida dejar fuera del paraguas del pacto los incumplimientos locales, darlos por irrecuperables y tratar de seguir gobernando en el resto de instituciones pasando página y procurando que el tiempo devuelva, en lo posible, una confianza que, sin embargo, ahora mismo parece profundamente triturada.
El Fdcan distanció mucho más el jueves a CC y PSOE tras la petición de Fraga de que se revise el reparto. Sin embargo, y en apenas tres horas, el secretario general de CC, José Miguel Barragán, recalcó que el fondo ya estaba aprobado para 2017 y que no habría cambios, sino un análisis con vistas a 2018. El PSC les reprocha haber cambiado los criterios, sobre todo por aplicar la triple paridad al 75% del dinero (118 millones), y usar la partida para buscar réditos políticos en ciertas islas (como La Gomera) o municipios grancanarios (Mogán, Firgas o San Mateo). CC lo niega y subraya que no ha habido cambios respecto al último decreto.
La mesa del pacto se anunció ayer mientras se celebraba el acto por La Constitución en la Cámara y con Clavijo en Baleares y Barragán, José Miguel Ruano, Rosa Dávila y Asier Antona (PP) en Madrid, aunque por motivos distintos. Clavijo dijo que las tensiones deben resolverse en los partidos. Los conservadores insisten en que, aunque hablen, no negocian con nadie y creen que el pacto seguirá por "la pérdida de dignidad del PSC y la falta de coraje de Clavijo".
Precedentes de gobiernos con mala relación
El primero en difundir ayer la mesa del pacto del lunes fue el presidente de la gestora del PSC en Tenerife, el diputado regional Héctor Gómez. Según recalcó, quieren saber por qué CC ha incumplido, "por segunda vez", en Arico y el Puerto y qué harán con sus concejales (se supone que la expulsión y la creación de gestoras, aunque crecen las dudas por la postura que pueda adoptar la ejecutiva insular). Gómez afirmó ayer que su partido "opera y trabaja desde el consenso y el diálogo, nunca desde imponer criterios que deberían haber sido consensuados por dos formaciones que han firmado un acuerdo de gobierno. El PSOE quiere saber qué ha pasado para no respetar lo estipulado en los criterios del Fdcan", dinero que, a su juicio, debía ir a la creación de empleo y no a la distribución de recursos por islas según la triple paridad.
Más allá de la desconfianza absoluta existente entre los dos socios, las distintas fuentes sobre todo de CC, que creen que el pacto continuará aluden a los problemas que ha habido en el pasado por las relaciones entre los socios. Es más, se recuerda que, entre 1999 y 2003, con Román Rodríguez de presidente y Adán Martín de consejero de Economía, "apenas ni se hablaban", sin olvidar los distintos problemas de Martín luego con José Manuel Soria o traiciones más pretéritas, como la de Manuel Hermoso a Saavedra en 1993, con la célebre censura que da pie a la creación de CC, o la moción de confianza de Fernando Fernández, en la que ATI le retiró el apoyo y acabó haciendo a Lorenzo Olarte presidente.
Por lo visto en el pleno del martes, la relación de Fernando Clavijo y Patricia Hernández vive ahora su peor momento con diferencia sideral, pues apenas ni hablaron y durante muchas horas ni se miraron pese a sentarse juntos. No obstante, fuentes de ambos partidos aún creen posible reconducir esta parte, si bien las dudas sobre la participación de Clavijo en la censura en Granadilla, por más que el presidente no pare de negarlo, así como Rosa Dávila y Francisco Linares, se han convertido en una daga más que considerable. Eso sí, las dudas (casi certezas) existen desde el principio.