El diferencial entre lo que recibe, de media, un agricultor o un ganadero por sus producciones y lo que pagó el consumidor se situó en enero en 2,26. Es decir, que de cada 2,26 euros que abonó el consumidor en la compra de productos frescos locales, el productor recibió un euro. Así lo pone de manifiesto el Índice de Precios Origen-Destino (IPOD) elaborado por COAG-Canarias mensualmente, que destaca que se trata del menor diferencial de los últimos doce meses.

Algunos productos sí mostraron diferenciales destacables. El mayor se dio en la acelga, cuyo precio fue 4,36 veces el pago recibido por el agricultor. También destacó la berenjena (se cobró a 0,60 euros por kilo y el consumidor abonó 1,96).