El sector de enseñanza de la Federación de Empleados de los Servicios Públicos (FeSP-UGT Canarias) ha exigido hoy una mayor estabilidad para los interinos docentes de las islas y una amplia oferta de empleo público para el sector.

En un comunicado, el sindicato defiende que "ya es hora de que se reconozca el esfuerzo realizado por el colectivo de profesores de Canarias durante los últimos años, en los que ha sufrido serios recortes en las condiciones laborales y retributivas".

"El profesorado, junto al resto de empleados de los servicios públicos, ha contribuido al ahorro presupuestario de la Administración y se han convertido en el principal contribuyente de la salida de la crisis de la que cual no es responsable", agrega la nota.

UGT destaca que son muchos los aspectos que tiene en su hoja de ruta, que preocupan a los docentes canarios, unos aspectos que "entorpecen de manera importante la labor de los profesionales y repercute en una enseñanza de calidad".

La FeSP-UGT de Canarias considera que la "funcionarización" en el sector educativo es algo "urgente y necesario" y que ahora se encuentran ante la tesitura del "aplazamiento obligatorio de unas oposiciones que permitirían la entrada de jóvenes" al mundo de la docencia.

"El desamparo legal condicionado por la falta de unos Presupuestos Generales junto a una legislación estatal dictada con carácter básico ponen en evidencia la restricción de las competencias autonómicas, en la que se ve afectada una posible convocatoria de oposiciones", subraya el comunicado.

UGT exige la modificación de la disposición transitoria cuarta de la Ley del Estatuto Básico del Empleado Público para que se posibilite la consolidación del empleo temporal.

A su juicio, el Gobierno regional debe hacer valer ante el Ejecutivo central su supuesto apoyo para que se beneficie la ciudadanía de las islas, ya que lo contrario supondría "un apoyo gratuito en perjuicio de los intereses de los propios canarios".

UGT también le reclama ofertas públicas de empleo que garanticen el acceso de los jóvenes al ejercicio de la docencia, que estén acordes a las necesidades del archipiélago y "no a la pírrica tasa de reposición marcada desde Madrid".

En su opinión, la realidad de las islas exige mayor financiación y calidad en los servicios educativos mediante el incremento del gasto social en los servicios públicos.