El consejero de Agricultura del Gobierno canario, Narvay Quintero, abogó ayer en el Parlamento regional por seguir buscando "alternativas" a la "pica" del excedente de producción -la destrucción de la fruta sobrante, que afecta sobre todo al plátano- y detalló las tres medidas en las que trabaja actualmente su departamento: la elaboración de harina para celiacos, la alimentación para el ganado caprino y la fabricación de compost.

En respuesta a una pregunta planteada por la diputada del grupo nacionalista canario (CC-PNC) Nereida Calero, el consejero recordó que la normativa permite retirar una parte de la producción que no se vende -hasta el 5%-, pero sostuvo que "hay que buscar salidas" para que la cantidad que vaya directamente a la basura sea lo más pequeña posible. Sin embargo, estas iniciativas se encuentran con un problema, la de la falta de una "regularidad" exigida por el mercado y que en el caso de la disponibilidad de excedente es poco viable.

En lo que va de 2017 no se ha retirado aún "absolutamente nada" de la cosecha debido a las condiciones climatológicas, señaló el consejero, que recordó que a la misma altura del año pasado habían ido a la "pica" cantidades importantes. A mediados de 2016 se habían destruido unos 12 millones de kilos de plátano.

Las quejas sobre la elevada cantidad de fruta desechada han motivado la búsqueda de medidas dirigidas tanto a reducir el excedente -mediante la venta en mercados distintos de los habituales- como a aprovechar este, sea enviándolo a los bancos de alimentos como utilizándolo para la elaboración de otros productos. Narvay Quintero avanzó que la Consejería estudia junto al sector primario que estos desechos se usen -además de su empleo para harinas, alimentación animal y abonos- para hacer zumos, yogures y mermeladas. En el caso de la fabricación de compost, recordó que el programa de cooperación interterritorial Pervemac ha concluido que los productos isleños tienen menos residuos fitosanitarios, lo que los hace más aptos y "sanos" para ser transformados en abono.

El consejero de Agricultura también compareció en el Parlamento para explicar las actuaciones de su departamento encaminadas a fomentar el enoturismo. En este sentido, varios diputados -Cristina Tavío (PP), solicitante de la comparecencia; Francisco Déniz (Nueva Canarias) y Francisco Déniz (Podemos)- lamentaron que el Archipiélago no cuente con ninguna ruta del vino certificada, puesto que la única que existía -en la denominación de origen Tacoronte-Acentejo- fue descatalogada a finales de 2013.

Tavío afirmó que en toda España hay "27 opciones" para visitar rutas del vino y que "ninguna de ellas está en Canarias". En este sentido, la parlamentaria popular animó a Quintero a trabajar para que haya "al menos una en cada isla".

El consejero repuso que las certificaciones de las rutas están en manos privadas y que las propuestas corresponden a ayuntamientos y cabildos. No obstante, admitió que "hay que propiciar los elementos" para que estas certificaciones lleguen y defendió los esfuerzos realizados para impulsar el turismo vitivinícola.

Pervemac II, programa de cooperación territorial Interreg MAC 2014-2020, en el que participan Canarias, Madeira, Azores y Cabo Verde, analiza los residuos de plaguicidas, micotoxinas y metales pesados en vegetales e investiga los riesgos que pueden tener sobre la salud de los consumidores de la región macaronésica.

Su objetivo es fomentar una dieta saludable, basada en el consumo de productos locales con una mínima presencia de estas sustancias. Para ello, formarán a agricultores con el fin de que hagan un mejor uso de los plaguicidas. Estas acciones se completarán con jornadas de formación teórica y prácticas demostrativas dirigidas a sensibilizar a técnicos y agricultores sobre la importancia del uso sostenible de estas sustancias.

Residuos de plaguicidas en vino y cereales

Tal y como ya adelantó EL DÍA, en el anterior proyecto Pervemac I se tomaron muestras, que fueron objeto de análisis, en puntos de venta directa al consumidor. Se analizaron un total de 1.260 muestras de frutas y verduras, 866 correspondientes a Canarias, y quedó demostrado que existía una mayor presencia de residuos de plaguicidas en los productos de importación respecto a los productos de la agricultura local.

Fruto de este primer trabajo, se detectaron también 40 casos de violaciones de los límites máximos de residuos (LMR) de plaguicidas, debido en su mayoría al mal uso de fitosanitarios no autorizados y, en casi todos los casos, consecuencia del desconocimiento más que un uso malintencionado.

Pervemac II viene a ser la continuidad del proyecto anterior y contempla el desarrollo de un exhaustivo programa de monitorización y análisis de residuos de plaguicidas, micotoxinas y metales pesados no solo en frutas y hortalizas, sino en cereales y vino, que se incorporan en esta nueva edición del proyecto. Asimismo, se llevará a cabo una encuesta de hábitos alimenticios en Cabo Verde que permitirá evaluar el riesgo de estas sustancias en los consumidores por la ingesta de los alimentos objeto de estudio.