Los servicios de Urgencias del Hospital Universitario de Canarias (HUC) y el Hospital Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC) se encontraron ayer con un pico asistencial que obligó a volver a sacar las camillas a los pasillos.

Mientras fuentes oficiales de La Candelaria aseguraron que este problema había ocurrido debido a la calima, desde el HUC insistieron en que "coincidieron pacientes que entraron a Urgencias para ingresar que tuvieron que esperar que se sucedieran altas hospitalarias".

En este sentido, miembros del sindicato de enfermería Satse aseguraron que en los pasillos del HUC llegó a haber 25 camillas. Sin embargo, desde el hospital insistieron en que tan solo fueron cinco.

Los sindicatos de ambos hospitales achacaron esta problemática a que el Plan de Urgencias aún no está puesto en marcha. En esta línea, Francisco Bautista, representante de la Federación de Servicios Públicos de UGT, aseguró que "si se tuviera un protocolo establecido", se podrían poner en marcha actuaciones para "desviar pacientes" cuando ocurren situaciones de esta índole.

Patricia Hernández, portavoz de Intersindical Canaria en La Candelaria, insistió en que ya se sabe que, "cuando hay calima, suceden este tipo de situaciones". De esta manera, aseguró que el problema es de los servicios sanitarios, que "no saben afrontar las situaciones que se repiten".

La situación de alerta amarilla por calima en las Islas, según la Agencia Estatal de Meteorología, se extenderá hasta finales de semana. Por ello, los sindicatos consideran que la situación de los hospitales puede empeorar en los próximos días.

De hecho, la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias informó de que, según los datos suministrados por la Red de Vigilancia y Control de la Calidad del Aire, los niveles de partículas que se están registrando en las estaciones de la red son superiores a los habituales y cercanos al valor límite diario de protección de la salud. La mayoría de las personas que acudieron a La Candelaria debido a la calima habían tenido descompensaciones respiratorias y eran pacientes con pluripatologías. En el HUC, por su parte, y según el sindicato de enfermería Satse, la mayoría de pacientes que ocupaban las camas eran crónicos.

La Consejería recomendó a los usuarios afectados que necesitaran atención médica acudir en primer lugar a su centro de salud o a los centros periféricos de urgencia para evitar "una posible saturación de los servicios hospitalarios".

Piden a Baltar que deje su "cortina de humo"

Intersindical Canaria, UGT y la Asociación en Defensa de la Sanidad Pública de Canarias (ADSPC) instaron al consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, a terminar con "su cortina de humo" y dejar de "perder el tiempo". Según Guillermo de la Barreda, portavoz de la ADSPC, Baltar está "huyendo hacia delante" y está "pidiendo que la ciudadanía dé soluciones", cuando está "sin fondos" y se encuentra en la misma tesitura que el anterior gestor sanitario.

Por su parte, Intersindical Canaria recordó que desde el pasado mes de enero "ya planteaba una petición a todos los grupos parlamentarios para que, con inmediatez, se convocase un debate monográfico sobre la sanidad pública que posibilitase un gran pacto por la sanidad". Sin embargo, lamentó que "Coalición Canaria, a fecha de hoy, ni siquiera haya dado respuesta a aquella solicitud", lo que, para el sindicato, "demuestra su desinterés por transparentar la gestión sanitaria y establecer compromisos políticos precisos para la optimización de los recursos".

El representante de UGT, Francisco Bautista, aseguró que le parece "muy bien el rumbo que está tomando el nuevo consejero". Sin embargo, insistió en que "es muy bonito decir palabras, pero queremos hechos".

Según la ADSPC, se trata "de la típica cortina de humo que se levanta cuando no se sabe qué hacer y al parecer ni siquiera cuáles son las necesidades de salud y atención sanitaria de nuestra población". Según aseguran, este último punto se podría resolver "en una semana" basándose en la iniciativa legislativa popular por la salud y la defensa de la sanidad pública canaria, avalada por más de 25.000 firmas y presentada en el Parlamento de Canarias en el año 2010, así como en el recientemente aprobado Plan de Salud de Canarias.