El Gobierno de Canarias repartirá 257.615 kilos de frutas y hortalizas frescas en 210 colegios de Canarias que llegarán a 54.270 niños, como parte del Plan de Consumo de Frutas y Verduras en las Escuelas.

En una nota de prensa el Gobierno de Canarias ha anunciado hoy que el presupuesto para la promoción del consumo de fruta y verdura entre los más jóvenes es de 600.000 euros, un aumento de 150.000 respecto al año anterior, lo que supone llegar a 9.956 alumnos y 41 centros educativos más que en el curso 2015-2016.

El consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas, Narvay Quintero, ha explicado que este plan tendrá una duración de 13 semanas, durante las cuales cada alumno recibirá dos piezas de fruta y verdura fresca de temporada y producción local a la semana, reparto que se hará durante la hora del recreo.

Los alumnos recibirán fresas, plátanos, sandías, melones, tomates cherry, papayas y naranjas con la intención de promover el consumo de fruta y verdura.

Quintero ha afirmado que esta iniciativa consiguió que el 75% de sus participantes consumieran más fruta el año pasado, lo que incide de forma muy positiva en los agricultores, y ha añadido que no solo se fomenta la salud sino el consumo de producto local, que está demostrado es más sano.

La consejera de Educación y Universidades, Soledad Monzón, ha indicado que el reparto de estas producciones, que se realizará a niños de entre 3 y 12 años de centros públicos, complementa las tareas de prevención y educación alimentaria que realizan las escuelas canarias.

Desde la Consejería se harán otras actuaciones como la entrega de material didáctico a la comunidad educativa y los talleres, hechos por el profesorado y dirigidos a motivar a los jóvenes a consumir estos productos, con información sobre el cultivo, producción, recolección y propiedades organolépticas, y sus beneficios para la salud.

El consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, ha recordado que, según datos de la Encuesta Canaria de la Salud de 2015, el consumo diario de frutas y verduras, aunque ha mejorado respecto a 2009, continúa siendo bajo (39,1%), apreciándose además un descenso de la ingesta diaria de fruta fresca.

"Medidas como esta nos parecen fundamentales a la hora de promover hábitos de vida saludables, y prevenir enfermedades como la obesidad y enfermedades asociadas", ha explicado Baltar.

Este plan es un programa europeo de aplicación en sus estados miembros que está financiado por la Unión Europea en un 90% y por la Comunidad Autónoma y el Estado en un 10%.

Según un estudio de evaluación de este programa, el 98% de los coordinadores de esta iniciativa en los colegios declara haber observado alguna mejoría en la aceptación de la fruta por parte de los niños y niñas, y el 90% manifiesta que la acogida de los padres ha sido entre positiva y muy positiva.