Buena parte de las 155 autoescuelas existentes en la provincia de Santa Cruz de Tenerife también se ven afectadas por la falta de examinadores de la Dirección General de Tráfico para atender la demanda actual de personas que deben pasar la prueba práctica del examen de conducir. Las empresas de formación vial explican que, ante esta circunstancia, los exámenes se retrasan en el tiempo y no han fechas fijas para realizarlos. La principal consecuencia de esa realidad es que los alumnos de las autoescuelas hacen menos prácticas y los ingresos de dichas emnpresas se reducen considerablemente.

Como informó en febrero de este año la Asociación Canaria de Centros de Formación Vial, hace tres años había 25 funcionarios examinadores y actualmente únicamente hay 14, de los que tres tienen derecho a jubilarse este año.

Para atender las necesidades de los usuarios, dicho colectivo empresarial considera que para atender la demanda en invierno era necesaria la incorporación de cinco examinadores más, o bien que se amplíe un "paquete de horas extras" para que los examinadores también hagan pruebas por la tarde. Y las inscripciones de alumnos se multiplincan entre los meses de mayo y octubre. La Confederación Nacional de Autoescuelas asegura que en verano se podría producir un colapso del sistema de formación con el cierre de numerosas empresas y el despido de miles de formadores. Dicha organización empresarial indica que la situación resulta especialmente grave en doce jefaturas provinciales de Tráfico, que suponen el 48% de los permisos expedidos: Alicante, Baleares, Barcelona, Ciudad Real, Cuenca, Girona, La Rioja, Lleida, Madrid, Navarra, Tarragona y Valencia.