La presidenta del grupo parlamentario socialista, Patricia Hernández, avanzó ayer que su formación liderará un plan de inclusión social si el Gobierno canario mantiene su "desidia" ante los síntomas de economía "enferma" que presenta el Archipiélago.

En rueda de prensa, Hernández comentó que, como paso previo, ya han solicitado una comparecencia del vicepresidente del Gobierno, Pablo Rodríguez -el reglamento impide hacer comparecer al presidente-, que tiene adscrito al comisionado de inclusión social y lucha contra la pobreza, para conocer los planes del Ejecutivo.

Hernández apuntó que pese a que en los dos últimos años Canarias ha crecido un 2% y un 3,5%, "la gente se ha empobrecido", con uno de cada tres hogares con muchas dificultades para llegar a fin de mes, y una tasa de pobreza del 35%.

La exvicepresidenta del Gobierno autonómico advirtió de que si la economía sigue con el rumbo actual, el Archipiélago "nunca" recuperará los umbrales de distribución de la riqueza anteriores a la crisis, y por eso, calificó de "alarmante e indignante" la "falta de respuestas" desde el Ejecutivo. "El PSOE no va a mirar para otro lado", dijo.

Hernández indicó que una estrategia contra la pobreza "no basta", porque solo es "paliativa", y aunque apoya la prestación canaria de inserción (PCI) o el plan de empleo social, reivindicó un plan "integral" basado en un mejor reparto de la riqueza para "cambiar" la distribución de la renta.

Además, aseguró que la última Encuesta de Población Activa (EPA) es "muy preocupante", porque el paro ha crecido el doble en el primer trimestre del año y 172.000 personas no disponen de ningún ingreso.