El vicesecretario nacional del PP, Javier Arenas, aseguró ayer que Génova, sede central del partido, siempre secundará lo que decida el líder conservador canario, Asier Antona, sobre la política de pactos en las Islas ahora o en el futuro. Lo hizo en el santacrucero hotel Mencey durante su visita a Tenerife para asistir a diversas reuniones del partido en Canarias sobre su planificación para ganar las elecciones locales de 2019 y sus 7 propuestas para mejorar las áreas claves de la gestión regional. A su juicio, la situación para el PP podría "ser más cómoda" entrando ya en el Ejecutivo, pero sí que tiene claro que darán estabilidad a las Islas.

A Arenas le ha acompañado el portavoz de los populares en el Senado, José Manuel Barreiro, quien resaltó el hecho de que el PP canario vuelva a tener desde estos días grupo especifico en esta cámara. No es la primera vez que los conservadores crean esta figura prevista en el reglamento, pero sí que se resalta en esta ocasión la relevancia que ha cobrado Canarias en la política nacional, si bien Arenas recordó que ese peso siempre ha sido considerable desde los gobiernos de Aznar.

El nuevo grupo del PP con los 8 senadores canarios (el mínimo requerido para esto son 4, lo que no puede hacer ningún otro partido) podrá intervenir en cualquier asunto que tenga que ver con las Islas y con independencia del tiempo del resto del grupo del PP. La portavoz de los senadores isleños será la concejal icodense Isabel García.

Barreiro también subrayó que, de momento, Canarias queda reforzada en el presupuesto que se pretende aprobar con 452 millones añadidos, si bien no quiso, como tampoco Arenas o Antona, mojarse mucho sobre la negociación del voto clave que queda: el del diputado grancanario Pedro Quevedo (NC).