El exsenador Casimiro Curbelo, presidente del Cabildo de La Gomera y diputado de la Agrupación Socialista Gomera (ASG) en el Parlamento de Canarias, no va a hacer comentarios de momento sobre las informaciones relativas a un pacto con la fiscalía respecto al incidente con policías en un bar sauna de Madrid en 2011.

En ese posible pacto con la fiscalía, del que hoy informa el diario digital El Español, Casimiro Curbelo reconoce su culpabilidad en el incidente con policías nacionales que protagonizó en 2011 cuando era senador del PSOE a cambio de una multa y una indemnización.

Su gabinete de prensa ha informado a Efe de que Curbelo se encuentra fuera de La Gomera y que conoce las informaciones publicadas que señalan que ha pactado con la Fiscalía del Tribunal Supremo una sentencia condenatoria por los insultos que dirigió a tres policías y la agresión a uno de ellos.

Sin embargo, ha anunciado que no tiene previsto hacer declaraciones sobre este asunto, ni siquiera para desmentir o confirmar el pacto, al menos hasta el lunes.

Según publica El Español, Casimiro Curbelo asume en ese pacto los hechos delictivos que había negado durante la instrucción, ocurridos tras ser expulsado junto a su hijo del bar-sauna Gola de Madrid.

En el pacto con la fiscalía, Curbelo acepta una pena de multa de 900 euros y una indemnización de 50 euros al policía al que agredió, en un condena en la que el fiscal ha aceptado aplicarle una rebaja muy cualificada de dilaciones indebidas.

El Tribunal Supremo había abierto juicio oral a Casimiro Curbelo por este caso en marzo pasado, acusado de presuntos delitos de resistencia a agentes de la autoridad y lesiones leves.

La causa contra el exsenador se abrió tras un incidente en la madrugada del 14 de julio de 2011 en Madrid, cuando el presidente del Cabildo de La Gomera se quejó a unos policías del trato que su hijo, él y una tercera persona acababan de recibir en un establecimiento del que habían sido expulsados.

Según los indicios recabados en la instrucción, cuando los policías le explicaron los pasos que debía seguir para presentar una denuncia, el hijo de Casimiro Curbelo insultó y empujó a un policía, por lo que fue detenido.

Curbelo llamó entonces terroristas y borrachos a los agentes, les avisó de que era senador y les amenazó con acabar con sus carreras y con denunciarlos por detención ilegal.

Tras este incidente, el PSOE decidió no volver a presentar a Curbelo en las elecciones de 2015 al Cabildo de La Gomera, pero Curbelo concurrió con su nuevo partido, ASG, repitió mayoría absoluta en la corporación insular y obtuvo tres de los cuatro escaños que corresponden a esa isla en el Parlamento de Canarias.