Alberto García Sanz, director de la Escuela Española de Salvamento y Socorrismo de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, será uno de los ponentes del I Congreso de Seguridad y Prevención en el litoral de Canarias, que organiza la Consejería de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, a través de la Viceconsejería de Medioambiente y Seguridad, los días 3 y 4 de octubre en el Paraninfo de la ULPGC.

García Sanz -miembro de la Comisión Educativa de la Federación Europea- se licenció en Educación Física y, tras obtener la suficiencia investigadora en un estudio sobre la formación del monitor de salvamento y socorrismo y del socorrista acuático, ha desarrollado con otros expertos los reales decretos que han dado lugar a los ciclos formativos de la modalidad.

Sanz ha dedicado toda su vida profesional al socorrismo y la formación en la materia. "El socorrista que desarrolla su labor profesional en el litoral canario cuenta con una ventaja fundamental frente al que lo hace en el resto del territorio español: el clima del Archipiélago permite que el socorrismo no sea un empleo de carácter estacional, sino anual, lo que favorece, además, que la inversión realizada en su formación tenga un retorno rápido", dice.

El ciclo de grado medio es la titulación que se está exigiendo en muchas autonomías para ejercer como socorrista y tiene una carga lectiva muy elevada, con unas 400 o 500 horas de prácticas necesarias para conseguir el título. "Esto, en comunidades como Galicia, donde el socorrista está activo 2 o 3 meses al año como mucho, puede resultar un hándicap a la hora de elegir este camino, ya que no se compensa la inversión en formación con horas de trabajo efectivo", indica.

García Sanz ve como "todo un acierto" la organización de este tipo de foros, "sobre todo en una comunidad como la canaria, con más de 1.500 kilómetros de costa y una climatología que favorece el uso del litoral y las zonas acuáticas durante todo el año", y lo considera vital para disminuir el número de ahogamientos, que, a fin de cuentas, es su finalidad.

Afirma que "estas jornadas deben servir para concienciar a la población de la importancia de la prevención y autoprotección, sino también para discutir, debatir y consensuar medidas institucionales y profesionales que faciliten la labor de los trabajadores del sector y para exponer la problemática de los accidentes en el medio acuático con el fin de establecer un plan de actuación".