Los municipios con áreas de influencia de parques nacionales recibirán 1,2 millones de euros antes de que finalice 2017, según indicó la consejera de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, durante una comisión parlamentaria.

El dinero se destinará a subvencionar proyectos que posibiliten actividades compatibles con la conservación de la naturaleza, la protección del patrimonio natural, cultural y arquitectónico y que contribuyan a la mejora de la calidad de vida de los habitantes del entorno.

Según señaló la consejera, el Gobierno de Canarias igualará, de esta manera, la aportación del Estado incrementando hasta 600.000 euros la partida de fondos propios dedicada en 2017 a ese fin.

"No solo hemos recuperado una subvención paralizada desde 2010, sino que hemos hecho un importante esfuerzo hasta alcanzar la mayor cifra invertida hasta el momento en estos municipios", señaló la consejera,

Se trata de una cifra "récord" de inversión, como señaló Barreto. Una cantidad a la que se llega tras una ampliación presupuestaria de 400.000 euros que ha permitido incrementar, desde los 200.000 euros previstos inicialmente hasta los 600.000 euros, los fondos aportados por el Gobierno de Canarias, igualando así la aportación del Estado, agregó.

Barreto recordó que la cantidad inicialmente prevista por el Estado para Canarias era de 446.400 euros, pero el incumplimiento de algunas regiones en la ejecución de la convocatoria de ayudas de 2015, supuso un incremento en la partida destinada a las comunidades que sí la han ejecutado correctamente.

Con este aumento, Canarias recibirá finalmente para el ejercicio 2017 un total de 610.494 euros del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente. "En estos dos últimos años hemos pasado a ser una de las comunidades autónomas más cumplidoras y el Ministerio ha reconocido y premiado este esfuerzo", destacó la consejera.

El plazo de presentación de proyectos permanece aún abierto y se cerrará el 11 de octubre. Además, el próximo 30 de noviembre, la Consejería publicará la resolución de adjudicación de las subvenciones y el 31 de diciembre hará el ingreso a los ayuntamientos del 100% de la ayuda concedida. El Gobierno de Canarias tendrá de plazo hasta el 20 de octubre de 2018 para acabar de ejecutar todas las acciones en esta línea.

El papel crucial del Cabildo en una reserva

La consejera de Política Territorial, Sostenibilidad y Seguridad del Gobierno de Canarias, Nieves Lady Barreto, aseguró que algunos cabildos se implican mucho en el desarrollo de las reservas de la biosfera, mientras que otros tienen una implicación menor.

Barreto, que compareció en comisión parlamentaria a petición del grupo socialista para hablar de la red canaria de reservas de la biosfera, quiso dejar claro que estas tienen implicación en el territorio y la labor que se desarrolla en cada una de ellas depende en ocasiones del dinero, pero también de la gestión.

La consejera recordó, asimismo, que tanto en 2016 como en 2017, el Gobierno de Canarias ha destinado una partida de 210.000 euros a diversos proyectos de educación ambiental, voluntariado y planes de desarrollo sostenible de la Red de Reservas de la Biosfera de Canarias (30.000 euros anuales a cada una de las siete reservas) y 20.000 euros a cada uno de los dos geoparques con los que cuentan las Islas (El Hierro y Lanzarote y Archipiélago Chinijo).

La consejera indicó que si se pretende que las reservas de la biosfera se conviertan en algo así como marca de proyectos es preciso apostar por ellas, y lo ejemplificó con la de Palma, que fue la primera en crearse, se ha apostado por ella, de forma que casi camina de forma independiente a la corporación insular.

Durante la comparecencia, la consejera opinó que, dentro de las figuras de protección del territorio, quizás la reserva de la biosfera es la marca que mejor permite la relación del ciudadano con el territorio.

Las reservas de la biosfera están en unos 120 países, y en el caso de Canarias hay siete, la primera de las cuales se reconoció en 1983, en La Palma, mientras que la última fue la del macizo de Anaga, en Tenerife, en 2015.