Aprovechando la declaración institucional del Parlamento en defensa del silbo gomero, el pleno de ayer estuvo marcado, en su inicio, y un poco después, en el jardín de la Cámara, por la presencia de 47 escolares de los seis municipios gomeros que, con camisas rojas, hicieron una excelente exhibición de este lenguaje único, reconocido ya a escala internacional. Algunos políticos se fotografiaron todo lo que pudieron (y un poco más) con los jóvenes intérpretes y luego posaron los portavoces de los grupos, Clavijo y la presidenta de la Cámara en el jardín principal.

Al comienzo, la sesión se centró en unos datos de pobreza que, como se preveía, marcaron la mañana, con un Clavijo reiterando su mantra de que ha venido a su sillón a cambiar las cosas que no funcionan y a afrontar las cuestiones estratégicas, y no solo los problemas superficiales.

Por supuesto, no solo no convenció a la inmensa mayoría de grupos, sino que comenzó a escuchar ya duras críticas sobre lo que empieza a ser su balance, como ese porcentaje, indicado por Noemí Santana, que ha subido del 28 al 44% en lo que a familias en exclusión social se refiere.

Por lo demás, la sesión no fue muy tensa, pero sí subió la temperatura con las intervenciones de la consejera del área social. Primero por una pregunta de Cruz Oval sobre la gestión del PSOE en esa área y, ya por la tarde, con los datos de dependencia incluidos en un reciente informe estatal, Valido dejó clara su fuerza, convicción en lo que hace y que no se arruga ante nadie, tal y como volvieron a comprobar la citada diputada socialista o Josefa Luzardo (PP). Tampoco por supuesto -salvo NC, que reconoció que ha sabido hacer valer la situación canaria con la dependencia- no convencieron ni el PP ni el PSOE. Es más, Patricia Hernández, aludida por Valido, censuró con cierto sarcasmo el "nivel parlamentario" de la consejera, demostrado antes de que, ya en plena noche, le instara a analizar el gran desfase entre los beneficios turísticos en las Islas y la precarización laboral, en contraste con comunidades como Baleares, donde se ha aprobado una mejora salarial del 17%. En esto, Valido patinó bastante (para carcajada de Hernández) al afirmar que el PSOE apoyó la reforma laboral del PP, "la gran culpable de la precarización", y mezclarlo (con varios años de desfase, de 2010 a 2012) con el cambio en la Constitución para el artículo 135.

Eso sí, por la mañana, y en otra situación que, como los niños gomeros, "cantó bastante", Hernández se paseó junto al jardín principal, mientras el nuevo secretario del PSC, Ángel Víctor Torres, abordaba con la prensa cuestiones como la TV Canaria, de la que exige un informe de la secretaria del Consejo Rector, o la pobreza. Torres se estrenaba así como "coordinador", "portavoz" o "presidente" en la sombra y sin escaño del PSOE, mientras, en la Cámara. Loly Corujo ejercía de nueva portavoz oficial y Hernández se sentaba en la segunda fila socialista.