Binter Canarias prevé incrementar en un 15 % sus ingresos en 2017 respecto al ejercicio anterior, hasta los 230 millones de euros, gracias al aumento de su oferta internacional, y situar el beneficio operativo un poco por encima de los 9 millones del año pasado, según su presidente, Pedro Agustín del Castillo.

La compañía, que también espera mejorar su beneficio neto respecto a 2016, transportará este año entre un 30 % y un 40 % más de pasajeros internacionales, ha añadido Del Castillo en una entrevista con Efe.

El presidente de Binter prevé que la demanda seguirá creciendo en 2018, pero a un ritmo mucho más suave, y en caso de que la demanda suba, "tenemos capacidad para incrementar la frecuencia con bastante rapidez".

Del Castillo, ha destacado que la aerolínea acaba de trasladarse hace tres semanas a su nueva y moderna sede en Canarias, en cuya construcción Binter ha invertido doce millones de euros.

A esta inversión se suman otros doce millones en la puesta en marcha del servicio interinsular en Cabo Verde (sin contar la flota trasladada allí), donde tras un año de operaciones, la ocupación se sitúa en un 60 %, porcentaje que está dentro de las previsiones iniciales del grupo, ha indicado.

Según Del Castillo, se trata de un mercado que tiene mucho potencial y aunque el negocio en Cabo Verde aún no es rentable, el directivo espera que el año que viene "empiece ya a equilibrarse la cuenta de resultados y a ponerse en positivo en 2019".

Hasta que Binter CV, la filial de la compañía creada para ofrecer el servicio interinsular en el país africano, "coja un nivel de equilibrio, iremos aportando capital", que el directivo calcula en unos dos millones adicionales y, "luego, se irá financiado por su cuenta".

Binter no prevé la apertura de nuevas rutas a corto plazo porque "lo más importante es consolidar los destinos que ya tenemos y, a medida que vaya aumentando el número de pasajeros, seguiremos incrementando la oferta, sobre todo la frecuencia a los lugares en los que ya estamos".

No obstante, Del Castillo no descarta algún nuevo destino, pero siempre en una distancia no superior a tres horas de vuelo y hacia el continente africano, donde están yendo bastante bien destinos más antiguos de la compañía como Marruecos o Cabo Verde, aunque Mauritania, Senegal y Gambia también están llegando a un punto de equilibrio.

Aunque el directivo no cree que la compañía, cuya vocación es absolutamente regional, se plantee operar vuelos de largo alcance, dado que "seguramente no hay suficiente masa crítica" para ello en el archipiélago, "evidentemente, Binter es muy ágil, gracias a sus socios, y cualquier oportunidad de negocio se va a analizar, pero el objetivo es crecer y potenciarse como hub (centros de interconexiones) de África", ha asegurado.

De hecho, el Gobierno canario "lleva mucho tiempo con el objetivo de convertir el archipiélago en un hub geoestratégico empresarial para multinacionales que quieran instalarse en Canarias de cara a sus negocios en África", ha señalado.

Para Canarias, sería "una cosa fantástica porque se diversifica la economía y el turismo" y este empeño del Gobierno incluye la puesta en marcha de rutas con Norteamérica, a través de una alianza entre Binter y SATA Air Azores.

Binter confía en cerrar a finales de año su acuerdo con SATA para empezar a ofrecer en 2018 tres vuelos semanales a Boston (EEUU) y Toronto (Canadá) con escala en las islas Azores (Portugal), lo que abriría a Canarias un mercado de turistas que ahora tiene como referencia principal las playas de los países del Caribe.

Ahora mismo, Binter tiene un acuerdo de código compartido con SATA para volar a las Azores pero no para ir a Norteamérica, ha explicado.