El 53% de los neurólogos españoles tiene dificultades para prescribir los tratamientos que considera más adecuados por las restricciones marcadas por las Comunidades Autónomas y los comités de los hospitales, ya que un mismo fármaco puede tardar hasta dos años de diferencia en ser aprobado por las diferentes regiones, lista encabezada por Canarias, Extremadura y Galicia, en más del 65% de los casos.

Así se desprende de la encuesta ''Prescripción de fármacos para el tratamiento de las enfermedades neurológicas'' elaborada por la Sociedad Española de Neurología, que se ha presentado este martes en Valencia en el 69º congreso de esta sociedad, y que revela diferencias notables entre autonomías.

Los especialistas de La Rioja, Navarra y Baleares son los que comentan tener menos dificultades, ya que menos de un 20% ha tenido alguna dificultad para recetarlos.

Al respecto, el presidente de la SEN, Óscar Fernández, ha exigido "un consenso" entre las comunidades autónomas para fijar unos criterios homogéneos que sigan las fichas técnicas que vienen marcadas por la Agencia Europea del Medicamento y adaptada por el ministerio para acabar con esta "inequidad" en la atención sanitaria.

Así, considera que "no es lógico" que una vez que Europa aprueba un fármaco tras pasar todos los controles de riesgo-beneficio las comunidades y los hospitales pongan sus "barreras" lo que lleva incluso a diferencias de hasta dos años entre comunidades en que ese mismo tratamiento pueda ser administrado.

Esta encuesta se ha elaborado a partir de entrevistas a cerca de un 15% de los neurólogos de cada comunidad para determinar si existen dificultades en la prescripción de fármacos para el tratamiento de las enfermedades neurológicas- que afectan a un 16% de la población española-; a qué son debidas y qué enfermedades son las más afectadas.

Así, la mayoría de las restricciones están marcadas por la comunidad autónoma o por su centro hospitalario (33%), por los sistemas informáticos utilizados para la prescripción (27%) y en tercer lugar porque el fármaco no incluya en su ficha técnica su uso para el tratamiento de esa patología, en un 20% de los casos. También se señalan restricciones por la obligación de recetar genéricos (10%), por el precio de los tratamientos (7%) o porque ese tratamiento solo pueden recetarlo médicos de otras especialidades (3%).

La principal dificultad que exponen los neurólogos españoles a la hora de prescribir fármacos es que las comisiones de su hospital rechazan su propuesta de prescripción (23% de los encuestados).

Le sigue que el tratamiento no está cubierto por la Seguridad Social (19%), que no está disponible en su CC.AA. (18%), o que encuentran restricciones en la prescripción (17%). Que el tratamiento no esté disponible en la farmacia del Hospital (10%) o que se haya denegado el visado por parte del Inspector Sanitario (8%) son otras de las razones que argumentan.

Las enfermedades con mayores problemas para prescribir tratamientos son las demencias (21%) - principalmente para el Alzheimer- ; las enfermedades desmielinizantes (21%) -sobre todo la esclerosis múltiple-, y las enfermedades cerebrovasculares (14%) - ictus, en su gran mayoría.

Al respecto, el vocal de la Sociedad Española de Neurología, Pablo Irimia, ha recalcado que "todos los pacientes deberían recibir el mismo tratamiento" con independencia de la comunidad en la que vivan o del hospital que les toque.

No obstante, ha aclarado que tener dificultades en la prescripción "no significa que los pacientes no dispongan de tratamientos" sino que se trata de "restricciones que implican una mayor burocracia" en el acceso y en otras ocasiones recetar otros tratamientos que "aunque puedan ser similares, no han sido la primera opción del neurólogo como la mejor alternativa terapéutica para el paciente".

NOVEDADES TERAPÉUTICAS

Por otra parte, en el congreso también se han presentado las principales novedades terapéuticas. Así, se han presentado 495 comunicaciones orales y 614 posters y se han rechazado un 30% para garantizar la calidad de los trabajos presentados.

Así, Láinez ha destacado que han surgido cuatro fármacos biológicos, que ya se empleaban para el cáncer o para la esclerosis múltiple, para el tratamiento de la migraña que bloquean el péptido relacionado con el dolor. Por el momento, se ha demostrado su eficacia en las migrañas episódicas y crónicas y se está estudiando en la migraña de racimo.

Asimismo, se están produciendo grades avances en el tratamiento de la atrofia muscular infantil con tratamientos biológicos que están logrando incluso que los menores vuelvan a andar. El problema de estos tratamientos es su precio ya que pueden costar hasta 800.000 dólares anuales.