El 24 por ciento de la población femenina en Canarias -unas 200.000 mujeres- y el 5 por ciento de los hombres padece incontinencia urinaria, según datos proporcionados en el Curso Internacional de Urología General y Uroginecología "SINUG 2017".

El curso, organizado por los Servicios de Urología y Ginecología del Hospital Universitario de Canarias y al que asisten más de 200 expertos, aborda las últimas novedades en el tratamiento de la incontinencia urinaria, explica la organización en un comunicado.

Dirigido por David Castro y Bárbara Padilla, médicos del Servicio de Uroginecología del centro, el congreso analiza las nuevas técnicas quirúrgicas de alta eficacia con las que se consiguen diagnósticos más exactos y tratamientos más eficaces.

Asimismo, los asistentes adquieren conocimientos anatómicos y fisiológicos sobre incontinencia urinaria y vejiga hiperactiva.

La calidad de vida de estos pacientes tiende a ser peor que la del resto de la población, conllevando otros problemas de salud como caídas, fracturas e infecciones urinarias, que suponen una importante carga económica, añade.

Las diferentes sesiones, mesas redondas y conferencias profundizan en las nuevas técnicas quirúrgicas de alta eficacia que se están utilizando en el Hospital Universitario de Canarias para la resolución de estos problemas.

Se han programado 5 mesas redondas en las que, entre otros asuntos, se analizan las ventajas de la nueva generación de mallas para prolapso; la incontinencia femenina y masculina, tanto severa como leve, desde el punto de vista médico, rehabilitador y quirúrgico.

Además, los síntomas asociados a esta patología impactan negativamente sobre la actividad laboral de los pacientes en España.

El tratamiento debe de plantearse de manera multidisciplinar, y pasa desde modificaciones en los hábitos de vida de las pacientes, la realización de ejercicios de suelo pélvico y la toma de medicación tanto por vía oral como el novedoso uso de parches transdérmicos.

Si estas medidas no son suficientes para el manejo de la enfermedad, existen otras alternativas como el láser transvaginal, la inyección de toxina botulínica y la neuromodulación.

Sin embargo, se ha detectado que el acceso de las pacientes a estas terapias no es siempre homogéneo y que el circuito asistencial de las pacientes afectadas varía entre las distintas regiones de España, y se propone que la formación del personal asistencial y la creación de nueva evidencia sobre su tratamiento pueden ayudar a mejorarlo.

En esta línea, otro de los problemas de salud, que se están tratando en esta jornada, y que tiene un gran impacto en la calidad de vida, es la incontinencia urinaria en los hombres tras ser sometidos a cirugía por cáncer de próstata.

Este tumor es el más diagnosticado en la población canaria después de los que afectan a la piel, y se estima que uno de cada seis hombres acabará padeciendo un cáncer próstata entre los 50 y los 70 años.

Puesto que normalmente se diagnostican en un estadio precoz, muchos de los pacientes pueden ser tratados antes de que la enfermedad avance y la mortalidad es baja si se compara con otros cánceres.

Sin embargo, la cirugía radical por cáncer de próstata puede causar incontinencia urinaria, variando el porcentaje de pacientes afectados en función del grado de pérdida de orina que se considere como problemático, siendo entre el 5% si solo se tiene en cuenta la necesidad de uso de pañales o compresas en todo momento del día y de la noche y hasta el 49% si se habla "de apenas unas gotas".

Aunque muchos de los pacientes recuperan el control sobre la micción en el año posterior a la cirugía, siguen siendo un número relevante de hombres los que consultan por este problema en consultas especializadas.