Canarias está a punto de completar su cuarto año de recuperación económica. Así lo reflejan los datos contenidos en el Boletín de Situación Económica de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife relativo al tercer trimestre de 2017. La creación de empresas y la generación de puestos de trabajo son los principales síntomas de la mejora que, sin embargo, tiene un punto débil: la dificultad de que la tasa de paro disminuya hasta los niveles anteriores a la crisis.

La directora general de la Cámara, Lola Pérez, advirtió ayer de la existencia de un "desempleo estructural" -con baja cualificación y muy dependiente del sector de la construcción- hace que la tasa de paro -actualmente casi en el 22%- evolucione con mayor lentitud que la cifra de ocupados -que ya es "similar" a la de 2008- y explica que sea "más difícil" que se sitúe en los registros previos al estallido económico, cuando llegó a ser inferior al 10%.

Con todo, el paro se ha recortado en alrededor de trece puntos desde los peores momentos de la crisis -llegó a rondar el 35%-, mientras que en los primeros nueve meses de 2017 se crearon más de 13.000 empresas, cuando en plena recesión se destruyeron 35.000. Ambos datos corroboran, según la entidad cameral, la recuperación de la economía canaria "gracias al intenso y prolongado ajuste de los agentes económicos", señaló su presidente, Santiago Sesé.

El informe confeccionado por la Cámara y patrocinado por CaixaBank apunta a que las perspectivas de futuro también son positivas. Para el año en curso, prevé una incremento del producto interior bruto del 3,7%, mientras que en 2018 este crecimiento experimentará una cierta moderación que, aun así, no impedirá que el Archipiélago continúe entre las regiones españolas económicamente más dinámicas.

Así, la Cámara de Comercio espera para el próximo ejercicio un aumento del PIB del 2,7%, un punto por debajo del calculado para 2017 pero superior en dos décimas a la previsión de otros organismos. Contar con "el mayor presupuesto público de la historia" favorecerá este dinamismo, que sin embargo quedará limitado por los "síntomas de agotamiento" que emite el sector turístico, que se aproxima al tope de su capacidad de ocupación.

Ahora, el reto es poner en marcha las "reformas estructurales pendientes". La mejora salarial figura entre los objetivos de la Cámara, que cree, no obstante, que debe ser "progresiva" y no lineal y siempre en función de la productividad para no lastrar la competitividad empresarial.

El presidente de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, Santiago Sesé, detalló ayer algunas de las reformas que, a juicio de la institución, deben ponerse en práctica para hacer frente a un panorama en el que el ritmo de crecimiento de la economía -"muy sustentado en la demanda interna y el turismo"- parece próximo a ralentizarse.

Entre estas actuaciones figura la lucha contra la economía sumergida, una situación que "hay que aflorar", advirtió. "Profesionalizar empresas", combatir "el desempleo estructural", "apostar por la educación y por una formación integral", acometer la "simplificación y agilización administrativa" a través de los procedimientos electrónicos, impulsar las energías renovables, afianzar la "competitividad" del comercio ante la "amenaza" del comercio electrónico, "incentivar el consumo de los turistas", "solventar los problemas de escasez de áridos" para la construcción, internacionalizar la economía y defender al sector hotelero -juzgado de "manera injusta"- son algunas de las tareas que, según Sesé, es preciso desarrollar en las Islas.

El director territorial de CaixaBank, Juan Ramón Fuertes, avaló el diagnóstico realizado por la Cámara y se mostró, incluso, "más optimista" en relación a la creación de empleo. Fuertes celebró que las empresas canarias hayan aprovechado los bajos tipos de interés para invertir -la actividad inversora es "excepcionalmente buena", dijo-, constató el descenso "significativo" de las tasas de morosidad y confirmó la mejora de la confianza de empresas, familias e instituciones.

El progreso del consumo -indicó el directivo de la entidad financiera- se pone de manifiesto en datos como el aumento de las compras con tarjeta de crédito, que este año suman un 30% más que en el anterior.