La nueva Ordenanza Municipal sobre Protección y Tenencia de Animales en la que está trabajando el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria sancionará con multas de 2.000 a 30.000 euros el maltrato y abandono animal o el adiestramiento para reforzar su agresividad, conductas que serán consideradas infracciones muy graves.

La concejal de Fomento y Servicios Públicos, Inmaculada Medina, ha presentad este lunes en rueda de prensa esta ordenanza, que incluye las nuevas exigencias legales para el mantenimiento y cuidado de las mascotas en el municipio, incluyendo medidas que refuerzan la protección y las sanciones por maltrato o abandono de los animales de compañía o prohibiciones como la de los circos que posean o utilicen animales salvajes en sus exhibiciones

La nueva normativa, abierta a las propuestas ciudadanas y del sector más especializado, que se convocará a través de la Mesa Municipal de Tenencia Responsable, está a la espera de incorporar los preceptivos informes, dictámenes y aprobaciones previas para garantizar el acierto y la legalidad del texto antes de su paso por Junta de Gobierno y aprobación inicial en Pleno, para luego cumplir los últimos trámites antes de su aprobación definitiva, para lo que se calcula que faltan unos seis meses.

Medina, a la que acompañó la jefa del servicio municipal de Salud Pública, Juana María Mangas, explicó que en esta ordenanza se considera a los animales seres sensibles con derechos y no sólo un bien jurídico a proteger, de acuerdo a la Declaración Universal de los Derechos de los Animales aprobada por la Unesco y ratificada posteriormente por la ONU, y se articulan los principios de respeto, defensa y protección de los animales, haciéndolos compatibles con la higiene, salud pública y seguridad de las personas y bienes.

"La nueva ordenanza sustituye a una de hace veinte años que había quedado obsoleta frente a una sociedad cada vez más sensible y concienciada con la protección de los animales, las garantías de sus bienestar y la mejora de la convivencia con animales en la ciudad", apuntó la concejal, que explicó que el nuevo proyecto, a la espera de superar los informes técnicos preceptivos, "tiene muchos puntos verdaderamente interesantes y novedosos, pues para su elaboración hemos podido incorporar los preceptos más modernos y actuales que se han aprobado sobre la materia".

Se regulan, por ejemplo, aspectos que tienen que ver con la confiscación preventiva por malos tratos, las dimensiones de los caniles para asegurar el bienestar del animal, la prohibición de los circos que posean o utilicen animales en sus exhibiciones o la permanencia de animales en vehículos cerrados al sol y sin ventilación.

También se abre la posibilidad de negociar su transporte en medios públicos colectivos, se regula la gestión de las colonias de gatos callejeros, se ordena la venta en tiendas de animales a través de catálogos, se regula la cría de animales asegurando el bienestar de las madres y el destete adecuado de los cachorros, o el atropello de un animal que hasta ahora nunca había sido tenido en cuenta por ninguna normativa.

Se regulan también aspectos como la tenencia de la fauna exótica; la cría de animales, con especial atención al trato de las madres, para garantizar su bienestar y evitar el abuso comercial; la compraventa de animales, con el fin de concienciar y responsabilizar de la compra de un animal, informando de sus necesidades y de las obligaciones que comporta su tenencia; o la compra a través de anuncios, internet, redes o similares para evitar el comercio fraudulento y el abuso de personas no autorizadas.

FOMENTAR LA SENSIBILIDAD Y RESPETO.

El objetivo es fomentar la sensibilidad y respeto hacia los animales "que comparten nuestro hábitat, teniendo particularmente presente las especiales relaciones del hombre con el perro y el gato", señaló Medina. Además, se regula mejor la tenencia de animales en viviendas, así como su conducta en espacios públicos, "a fin de minimizar las molestias y garantizar una convivencia pacífica". Y se persiguen y sanciona, concluyó Medina, los malos tratos, el abandono o cualquier comportamiento que "suponga innecesariamente dolor, sufrimiento o angustia de los animales".

También se promueve la esterilización de animales adoptados o comprados para evitar las camadas no deseadas o la utilización de los animales para la cría fraudulenta; se regula por primera vez el atropello de un animal, a los efectos de no abandonarlo herido; se acortan los plazos para la estancia de los animales en el albergue, a fin de proceder lo antes posible a su adopción; se regula la eutanasia como último remedio frente a otros destinos del animal; también la ordenación de las colonias de gatos callejeros; y se presta especial atención a la convivencia de los animales en el entorno urbano, promoviendo áreas específicas para el disfrute con los animales y las normas de civismo y convivencia pacífica.

Además, se establece una nueva regulación de las infracciones, estableciendo sanciones leves por la utilización de collares de ahorque, pinchos o eléctricos que resulten dañinos, exhibir animales en los escaparates de los establecimientos de venta, o su no esterilización para impedir la reproducción incontrolada van desde los 100 a los 300 euros.

De 301 a 2.000 euros se aplicarán por infracciones graves, como la carencia de microchip y las deposiciones o la tenencia de animales en lugares donde no se garantice su bienestar o donde puedan suponer un peligro o amenaza.

Se consideran infracciones muy graves el maltrato y abandono o el adiestramiento para reforzar su agresividad, conductas que se sancionarán con multas de 2.001 a 30.000 euros.

En la actualidad, ya se ha superado la primera fase del trámite administrativo para su impulso y aprobación final por el pleno. Se ha llevado a cabo el trámite de consulta previa, con la participación directa de los ciudadanos, que han realizado numerosas aportaciones al texto. "De todas ellas, merece la pena destacar el unánime rechazo al maltrato y abandono, la propuesta de sanciones más severa contra los infractores por cuestiones como la venta clandestina de cachorros o las deyecciones en la vía pública. así como una intervención rápida por parte de los cuerpos policiales, entre otras muchas sugerencias", explicó la concejal.

De esta forma, y a falta de los últimos trámites antes de su aprobación definitiva, Las Palmas de Gran Canaria va a disponer de una nueva regulación con la que "vamos a lograr el máximo nivel de protección y bienestar de los animales de compañía, haciéndolo compatible con la tenencia responsable, segura y cívica en los entornos urbanos", dijo Medina.