En materia de seguridad y Protección Civil, cuanta más prevención y planificación para coordinar recursos, mejor. Por ese motivo, la Dirección General de Seguridad y Emergencias del Gobierno canario trata de impulsar que cada ayuntamiento cuente con su propio documento para saber afrontar con garantías cada situación grave que se registre y se pueda distribuir a diversos medios de forma adecuada.

Nazaret Díaz, directora general de Seguridad en el Ejecutivo autónomo, comenta que, actualmente, menos del 30 por ciento de los consistorios en el Archipiélago posee su Plan de Emergencias Municipal (PEMU). Ese parámetro no ha cambiado sustancialmente desde hace cinco años. En base a los últimos datos que posee dicho organismo, de las 27 corporaciones locales que disponen de esos protocolos de intervención, 16 son de Tenerife. Los siete cabildos sí cuentan con tales herramientas.

Para cambiar el panorama, el Gobierno canario celebró ayer en la sede de Presidencia en la capital tinerfeña una jornada de formación en planes de emergencias, prevención de riesgos graves y gestión de estas realidades.

Nazaret Díaz recuerda que uno de los objetivos fue divulgar el Plan Territorial de Emergencias de Canarias (Plateca) y promover que cada municipio tenga su PEMU. Comenta que, si estos documentos están homologados, se integran, progresivamente, en el de la Administración superior, si hiciera falta. Es decir, el del Ayuntamiento en el insular, este en el autonómico y, llegado el caso, el regional en el nacional.

La intención es que, ante una situación de emergencia, "no haya disfunciones y los recursos actúen de forma coordinada".

Según Díaz, los ayuntamientos disponen de dos fórmulas para tener su plan. Una consiste en acudir a técnicos externos y otra es recurrir a sus propios profesionales, si los tuviera.

No obstante, el Ejecutivo también ofrece una aplicación informática, llamada Plan EM, "que facilita mucho la redacción de los documentos".

Florencio López, jefe de Protección Civil del Gobierno canario, recuerda que cada Plan municipal debe servir para evaluar los riesgos que existen en dicho territorio, como, por ejemplo, los naturales, meteorológicos (inundaciones, avenidas, olas de calor o frío), incendios forestales, así como los hechos provocados por el hombre (accidentes varios, emergencias sanitarias o de transportes, entre otros), los vinculados a eventos deportivos o festivos, o bien las contaminaciones químicas o nucleares. López aclara que los riesgos no son iguales en todos los municipios y cada ayuntamiento tiene que incidir en aquellos que, potencialmente, puedan ser mas frecuentes en su zona.

Además de contar con un catálogo de recursos disponibles, un plan debe determinar a cuánta gente se debe evacuar, hacia dónde y por cuánto tiempo si, por ejemplo, hubiese un incendio forestal.

Florencio López insiste en que cada PEMU debe tener una estructura que no varía si la emergencia pasa a nivel insular o autonómico. Manifiesta el jefe de Protección Civil de las islas que, en esas situaciones, se amplían los recursos que intervienen bajo un mando único.