UGT y CCOO en Canarias lamentan que el "superpresupuesto" de Canarias para 2018 (el mayor de la historia de las Islas con 8.239 millones, un 13% más que el año anterior) sea una oportunidad de oro perdida para mejorar en las cifras de empleo y en la cohesión social del Archipiélago. Así se expresaron ayer los secretarios generales de ambas organizaciones en las Islas, Gustavo Santana (UGT) e Inocencio González (CCOO), quienes no descartan una huelga general durante el presente año.

"Nuestras previsiones no son tan optimistas como las del Gobierno canario y la de los empresarios. Estos presupuestos son desiguales, rompen la cohesión social y vienen a consolidar un modelo de crecimiento que ya se ha demostrado como fracasado", dijo Santana. A su juicio, se puede consolidar la precariedad en el empleo y consolidar el hecho de que tener un trabajo en las Islas tampoco impide "que no estés en riesgo de exclusión social o pobreza".

Sobre esto, recordó que, mientras el Producto Interior Bruto canario creció un 3,3% en 2017 y el paro bajó un 6,77%, los índices de pobreza apuntan a que un 44,6% de los canarios están en riesgo de exclusión social o pobreza. El sindicalista explicó que, durante el año pasado, hubo 835.785 contratos para que el paro bajara en 15.687 personas. "Es muy difícil aventurar que se esté hablando de empleo neto, indefinido o empleo estable y de calidad", matizó.

Santana recordó que el Gobierno de Canarias prevé un crecimiento de PIB del 2,8% y reducir el paro en 20.000 personas al tiempo que se dará una rebaja fiscal de 124 millones con incentivos y estímulos que no fijan un "límite de rentas" ni atiende al "patrimonio preexistente de los beneficiarios, tanto del IRPF como del IGIC o de los actos jurídicos y administrativos. Al no poner límite, a quien se favorece es a los que disponen de renta y de rentas más altas".