Un total de 25.374 personas cobraron el pasado año la Prestación Canaria de Inserción, de los que 6.237 eran menores de edad, según los datos de la Consejería de Políticas Sociales del Gobierno de Canarias.
Según estos datos, de los menores, 677 eran menores de tres años y el presupuesto ejecutado ascendió a 53.040.962,27 euros, lo que significa más de medio millón más con respecto a 2.016.
La Consejería recuerda que la Prestación Canaria de Inserción consta de una ayuda económica y un apoyo a la integración social y laboral mediante actividades de inserción.
La ayuda económica depende del tipo de hogar y con un solo miembro la cantidad a percibir es de 476,88; de dos miembros, 539,63; 88, de tres miembros, 589,83; y así hasta 665,13 euros para una familia de seis miembros.
La media el pasado año ascendió a 489,81 euros ya que el 47,05 % de los tipos de hogares protegidos son unipersonales y el 30,62 % se trata de hogares de familias monoparentales con hijos a cargo, siendo la mayor parte una mujer con un hijo, siendo la media de edad de 47 años por parte del beneficiario solicitante.
En cuanto a la inserción, esta puede ser de tipo social o laboral y también escolar o ligadas a razones de desestructuración familiar, educativa, o desajustes personales.
En el ámbito de la inserción laboral, 14,9% de los beneficiarios potencialmente activos ha conseguido trabajo durante el 2017.
La directora general de Políticas Sociales, Reyes Henríquez, indica en la nota que en 2018 se va a intensificar las actuaciones conjuntas entre el Servicio Canario de Empleo y la Dirección General de Políticas Sociales para impulsar un proyecto integrado de gestión integrada en el marco del Plan Integral de Empleo de Canarias y el Plan de Empleo social que lidera el SCE.
En 2015 se modificó la Ley de Prestación Canaria de Inserción ampliando el colectivo a todas aquellas personas que no dispongan de recursos económicos y estén en riesgo de exclusión social y aminorando los tiempos de gestión para garantizar el acceso rápido y efectivo a la ayuda que supone la PCI a las personas que lo solicitan.