El promotor inmobiliario Jaime Cortezo ha sido condenado a dos años y seis meses de cárcel y al pago de una multa de 814.586 euros por un delito contra la Hacienda Pública, a la que deberá restituir los 271.528 euros que defraudó, según una sentencia hecha pública hoy.

En un fallo contra el que cabe recurso ante la Audiencia Provincial, el Juzgado de lo Penal número 1 de Las Palmas de Gran Canaria declara probado que la sociedad Hoya del Pozo SA, propiedad de Cortezo, presentó una declaración del impuesto de sociedades del periodo impositivo 2012 "no veraz ni ajustada a la realidad" en la que dejó de ingresar al fisco 271.528 euros.

En ella redujo incorrectamente la base imponible del impuesto en 3,4 millones de euros de forma "absolutamente consciente", al contabilizar y declarar unos gastos no deducibles y otros ficticios, así como operaciones con personas y entidades vinculadas con él que, o bien no eran deducibles o no fueron acreditadas.

Así, según la sentencia, contabilizó indebidamente y declaró gastos muy superiores a los reales, con lo que dejó de ingresar a la Hacienda Pública la cantidad referida.

Para ello, computó como deducibles en el impuesto sobre sociedades numerosos gastos personales suyos y de su entorno familiar más próximo, como viajes, hoteles o restaurantes.

Utilizó también entidades vinculadas a él para contabilizar unos gastos por servicios inexistentes por importe de 457.310 euros e hizo una dotación en el ejercicio 2012 de una provisión por responsabilidades de unas viviendas transmitidas en 2007 y 2008 por importe de 2.025.038,18 euros "cuyo reflejo como gasto es absolutamente improcedente".

Así mismo, infringió la obligación de integrar en la base imponible de 2012 la mayor parte del dinero que destinó a la Reserva para Inversiones en Canarias (RIC) en el ejercicio 2008 (927.038,17 euros), ya que había incumplido los requisitos que regulan este beneficio fiscal.