La Mesa de Transporte Sanitario No Urgente (TSNU) ha gestionado un total de 884.895 servicios en el 2017, con 461.213 pacientes trasladados, de los que el 53 por ciento correspondió a traslados para acudir a tratamientos de rehabilitación, mientras que un 32 por ciento necesitó desplazarse a un centro sanitario para acudir a las sesiones de diálisis.

En cuanto al resto de los servicios, apuntan, estuvo relacionado con consultas médicas, pruebas diagnósticas y altas en planta o en urgencias, principalmente, según informó el Gobierno de Canarias en nota de prensa.

Asimismo, expone que de lunes a viernes, la media diaria de servicios se situó en los 3.400, si bien también se realizan traslados los fines de semana para diálisis y altas. Los servicios se contabilizan como número de veces que el paciente hace uso de una plaza, ya sea un solo trayecto o un trayecto de ida y vuelta.

La Mesa de Transporte Sanitario No Urgente, está gestionada por la empresa pública Gestión de Servicios para la Salud y Seguridad en Canarias (GSC), y dispone de una flota de 234 recursos en todo el archipiélago, haciéndose caso de los traslados solicitados por un facultativo del Servicio Canario de Salud (SCS) tras ser valorada la situación clínica o a la imposibilidad física del paciente para hacer uso de medios ordinarios de transporte, según los criterios establecidos en la Instrucción 7/98 del Servicio Canario de la Salud.

Estos recursos, apuntan, se coordinan de forma independiente a las urgencias o emergencias, que se solicitan directamente al Servicio de Urgencias Canario (SUC) mediante llamada al 112.

Respecto al tipo de servicios atendidos, el 95,4 por ciento del total correspondió a servicios programados, referidos a los que se solicitan con al menos 12 horas de antelación, que puede ser puntuales como es el caso de los trasladados solicitados para acudir a una consulta y prueba diagnóstica, o prolongados que son aquellos que se solicitan para su realización de forma secuencial en el tiempo para recibir tratamiento de rehabilitación, hemodiálisis o radioterapia, entre otros.

En cuanto al resto de los traslados corresponde a servicios diferidos, que son solicitados a la Mesa de Transporte No Urgente (MTSU) sin antelación, por ejemplo, una vez que el paciente recibe un alta en planta o en urgencias.

Los vehículos de transporte sanitario colectivo con o sin ayudante/camillero están destinados al traslado conjunto de un número máximo de ocho pacientes con limitaciones para el uso de medios ordinarios de transporte, de índole exclusivamente sanitario, y que se prevea no necesitarán asistencia sanitaria en ruta desde el punto de origen a los centros sanitarios y viceversa. El traslado se puede realizar en camilla, en silla de ruedas o sentado, dependiendo de la movilidad y/o limitación del paciente, siendo el traslado individual gestionado por la MTSNU en función únicamente de criterios clínicos.