Endesa detectó 2.087 casos de fraude eléctrico en 2017 en Canarias, que suponen más de 20 millones de kilovatios/hora consumidos de forma irregular mediante el uso de métodos antirreglamentarios, ha informado hoy la empresa.

En el conjunto de los territorios en los que opera en España, Endesa sacó a la luz cerca de 68.000 fraudes y recuperó 761 millones de kilovatios/hora defraudados en 2017.

El pasado año, una de cada cinco inspecciones realizadas por la compañía concluyó con la detección de fraude, se indica en un comunicado.

En el 40% de los casos se trató de enganches ilegales a la red por parte de usuarios sin contrato y, el resto, de otro tipo de fraudes como dobles acometidas o manipulación de los equipos de medida.

En los últimos tres años, las pérdidas de energía contabilizadas por Endesa se han reducido en casi un 7% gracias al refuerzo de los medios para combatir el fraude, ya que la reducción de pérdidas de energía en la red y la lucha contra el fraude son una de las prioridades de Endesa en la red de distribución en los próximos años.

El fraude eléctrico es, sobre todo, un problema grave para la seguridad y la salud de las personas, tanto para el propio defraudador como para los que le rodean, indica Endesa.

En los últimos años, se han registrado numerosos casos de incendios en instalaciones y viviendas como consecuencia de esas manipulaciones e, incluso, ha habido que lamentar la pérdida de vidas.