UGT y CCOO secundarán el 22 de mayo en Canarias las movilizaciones programadas ante las sedes de las patronales de todo el país para exigir una subida general de los salarios del 3,1% y, en el caso de las Islas, que los convenios fijen un sueldo mínimo de 1.000 euros.

Así lo anunciaron ayer en conferencia de prensa los secretarios generales de los dos sindicatos en Canarias, Gustavo Santana (UGT) e Inocencio González (CCOO), quienes especificaron que las dos organizaciones también demandan una mayor estabilidad laboral, aumentar la incorporación de jóvenes y mujeres a un mercado de trabajo "con garantías", acabar con la brecha salarial y conciliar con la vida familiar. Santana subrayó que en estos momentos prevalecen los acuerdos entre las empresas y sus trabajadores sobre la negociación colectiva, algo que, a su juicio, no beneficia al empleado, porque cuanto menor es el ámbito de aplicación de un convenio, menos logros consiguen.

UGT y CCOO se preguntan por qué mientras crecen los beneficios empresariales, no suben los salarios, continúa la brecha salarial entre hombres y mujeres, existe mayor precariedad laboral y disminuye el poder adquisitivo de las pensiones.