Los representantes del Gobierno de Canarias salieron "cargados de optimismo" de la reunión mantenida ayer por el grupo que analiza las condiciones laborales del sector de la hostelería en varias comunidades autónomas. El director general de Trabajo del Gobierno regional, José Miguel González, aseguró que existen "muchas posibilidades" de que el Ministerio de Empleo modifique el catálogo de enfermedades profesionales para reconocer varias patologías a las camareras de piso, así como a los cocineros y ayudantes de cocina.

El grupo de trabajo está integrado por las comunidades autónomas de Canarias, Baleares, Andalucía y Madrid, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y las organizaciones empresariales y sindicales más representativas. La labor conjunta desarrollada en este foro por los dos archipiélagos ha consistido en trasladar a la Administración central, competente sobre el catálogo de enfermedades profesionales, la importancia de la "insuficiente" declaración de estas patologías.

"Si en un territorio se notifican pocas enfermedades profesionales, pero se dan muchos accidentes leves, se está produciendo una infradeclaración de estas patologías", advirtió ayer José Miguel González, presente en el encuentro junto al director del Instituto Canario de Seguridad Laboral (Icasel), Elirerto Galván.

González aprecia "mucha disposición" en el Ministerio a modificar el catálogo para reconocer nuevas dolencias a camareras de piso -las conocidas como "kellys"-, cocineros y ayudantes de cocina tras la exposición realizada por los representantes de Canarias y Baleares. Estas patologías estarían relacionadas con los movimientos repetitivos que ejecutan estos trabajadores en sus tareas y se traducen en sobrecargas en las articulaciones. Se trata, en concreto, del síndrome del túnel carpiano, que afecta a la muñeca; de la epicondilitis, que se centra en el codo, y de la bursitis, que afecta al hombro.

Para que se produzca una mayor notificación de las enfermedades profesionales -explicó el director general de Trabajo- es necesaria "una mejora de la acreditación de las patologías", mediante el estudio de las dolencias leves. Canarias afirma que ya ha hecho esta labor de análisis y que ha demostrado al Ministerio que en las Islas tienen lugar "picos" de estas patologías que indican que existe una infradeclaración.

Pese a que la declaración de las enfermedades aún es insuficiente, 2017 fue el año en que más se notificaron en Canarias: 208 en todos los sectores y 37 en las actividades vinculadas a los establecimientos alojativos. Un 70% de las declaraciones de la hostelería correspondió a mujeres, lo que puede dar una idea de la forma en que este fenómeno está afectando a trabajadoras como las camareras de piso.

Esta mayor incidencia en el colectivo femenino ha sido la tónica del sector de los hoteles y apartamentos durante los últimos nueve años, en los que el 73% de las personas que han sufrido las dolencias notificadas en los servicios de alojamiento fueron mujeres.