ANPE Canarias solicitó a la Consejería de Educación y Universidades que debido a que todos los integrantes del Servicio de la Inspección Educativa son miembros de cuerpos docentes no universitarios por imperativo legal, este colectivo de profesionales de la enseñanza no puede quedar al margen de las reivindicaciones laborales que sus representantes plantean a la Administración Educativa.

El presidente autonómico del sindicato, Pedro Crespo, en un comunicado remitido a Efe, insiste en que “la función de asesoramiento y ayuda al profesorado debe ser siempre la prioritaria para los inspectores e inspectoras, más allá de su obligación de supervisar o controlar las prestaciones del sistema educativo y el adecuado cumplimiento de la normativa vigente”.

"Para ello", añadió el sindicalista, "la Consejería debe realizar un gran esfuerzo, que ya ha comenzado tímidamente para incrementar sus efectivos de manera que la plantilla crezca en la práctica totalidad de las zonas, para posibilitar un contacto más estrecho y permanente con el profesorado destinado en los centros comprendidos en cada ámbito de influencia.”

En cuanto a reivindicaciones laborales, Pedro Crespo denunció que los integrantes de la Inspección Educativa en Canarias, son, actualmente, los peor pagados de todo el Estado y ANPE Canarias "quiere terminar cuanto antes con esta injusta discriminación retributiva, especialmente injusta por nuestras características insulares.”

“Nuestra organización ya ha exigido a la Consejería un acuerdo específico para incrementar sus complementos retributivos hasta alcanzar la media nacional o, de no ser posible, que se incluyan estas mejoras salariales dentro del Plan de Reconocimiento Profesional y Social del Profesorado, cuyo desarrollo y concreción debemos continuar negociando”, aseguró Crespo.

El presidente de ANPE Canarias también destacó que “el elevado nivel de carga burocrática que soportan los inspectores redunda negativamente, sin duda, en la atención que les gustaría prestar al profesorado y a los propios centros educativos. ÑOjalá podamos recuperar pronto la figura del Inspector-Orientador!, -concluyó Crespo”.